Parábola.
La Mente (como gestor de capacidades) y nuestra Consciencia de Existir.
La Consciencia (saber que se existe), es lo que nos hace “común” y nos permite
“vincularnos” y “entender/entendernos” a todos los “Seres Humanos”; también entender al resto de seres que nos
rodean siendo, por ello, capaces de interactuar con ellos (etología) – también con los animales, “existiendo
consenso” en que poseen consciencia.
La Consciencia nos hace “sensibles” a la
existencia, siendo los sentimientos, las emociones, la sensibilidad … lo común
a los “Seres Humanos”, y en general a
los “seres vivos”, conviniéndose, en alguna medida, como el “paradigma implícito” de estar vivos (“implícito” porque definir la Consciencia
tendría las mismas dificultades que definir la vida, al no saber qué es
realmente ni como se genera o aparece y porqué)..
Consciencia que nos lleva “a saber” que existimos; siendo nuestra existencia (y consciencia de existir) lo que resulta común, y nos hace común a todos. A través de nuestra “mente” (que tomaría “consciencia/a veces inconscientemente”/ de nuestros recursos posibles, disponibles y a su vez de las limitaciones “impuestas” en el contexto físico/social) podemos “conectar”, “entendernos/comunicarnos” unos con otros (tal vez, siendo tan común la consciencia como “denominador común” de la vida material, podríamos adentrarnos en cómo se concebía la existencia del “todo lo que nos rodea” desde la antigüedad, y más allá, en tiempos remotos de la Humanidad).
Toda cultura, por muy primitiva que fuere,
tiende a construir un relato sobre el origen que hubiera dado lugar a la existencia del mundo;
de cómo fuera posible la aparición de la
vida que nos rodea
y,
concretamente, del propio Ser Humano (a
veces, incluso, se relata la aparición del primer ser humano).
La evidente “dependencia” del Ser Humano
del propio entorno material/físico donde se halla
-evidencia
recurrente en toda cultura Humana-
llevaría a la necesidad inevitable de darse “una” explicación sobre el “origen” del Mundo.
Cada cultura (primitiva o evolucionada) “verificaría” la relación con el entorno
Natural que los contiene,
incluidos los diferentes seres vivos que
les rodean (animales, plantas y con otros
seres más semejantes - otros seres humanos)
llevándoles a representarlos y a ponerles
nombre,
y, a su vez, a darse nombre a sí
mismos;
siendo cada nombre “reflejo” de esa
relación con el entorno.
También, al alzar la mirada hacia el Cielo,
al Firmamento con sus astros y estrellas,
y/o vislumbrar el horizonte otros
territorios,
llevaría a responderse a las preguntas que
ya explicitara Aristóteles (S.IV a. d. C.) en su obra Ética nicomáquea,
Aristóteles pregunta: ¿Dónde estamos? ¿Qué
es lo que nos rodea? “¿Cómo o porqué existe todo esto?“ “entenderse” la
existencia de una “voluntad” que hiciera posible el “Todo”.
Desde entonces estas preguntas han ido evolucionando5, (formando parte esencial de cualquier hecho (o suceso) que, no habiéndola visto directamente, se hubiera de explicar: “Qué”, “Quién o Quiénes”, “Cuando”, “Dónde”, “Por qué” y posteriormente “Cómo”).
Algunas culturas más distantes, parece que
tuvieran “la pericia/habilidad” específica de abordar el “origen del Ser” desde
un “estadio previo” a la existencia del propio Ser, señalando un concepto
difícil de definir (una
”sustancia/insustancial” posee “Voluntad/Involuntaria” inicial – o voluntad/no
voluntad, “de ser” y a la vez “no ser”, “no contenible” y de la que “no fuera
plenamente consciente de sí”, pero a su vez siempre capaz de “ordenar”
cualquier “medio” o que “en todo medio” que se hallara ordena o se ordena en sí
mismo, y en consecuencia se hallara).
“Ello”, previo a la existencia de vida material, pero a su vez, daría
razón de ser a la materia viva: La “Consciencia/Conciencia”.
El relato narraba el proceso de la aparición/descubrimiento de la “consciencia de sí misma”. Un proceso que se vinculaba al “vértigo/miedo”– fuera lo que fuese, que fuera reconociendo en sí mismo/a, - una capacidad que, a su vez, le diese/o diera “temor”; por lo que se “fuera escondiendo” “de sí mismo/a”, dando como resultado la variedad y diversidad de “la creación”, “de la existencia”.
La leyenda diría algo así, como: “lo primero que apareciera fuera una “vaca” y cuando (la “consciencia”) se diera cuenta que “era” una “vaca” tuvo algún temor (indefinido pero profundo – tal vez súbito) que la hizo transformarse en “toro”; pero cuando se diera cuenta de que se hubiera convertido en “toro” volviera “el temor” y – nuevamente, tal vez siempre súbitamente - se transformaría en “cabra”… (y así se generarían/aparecerían todos los seres conocidos).
Nada indicaría en el
relato – tal cual se recuerda su lectura
haría ya unos 40 años o más – que la “voluntad” de la
“consciencia/conciencia” fuera convertirse en “ser” antagónico al “ser” que
“descubría/tomando conciencia de sí” haberse convertido, sino más bien parecía
“sucesos accidentales” y la voluntad operara a solo efectos de no verse a sí
misma como tal consciencia/conciencia limitada en un “ser”.
Es decir, la consciencia - en esos relatos destinados a asentar el origen de lo conocido por una cultura concreta – “rechazaría” – por el motivo que fuere que fuera - verse limitada al constituirse en un ser concreto y limitado, y ese temor (aparentemente súbito) le llevaría a “migrar” (de cada ser “creado/generado”) (concretando nuevos seres diferentes) transformándose en un proceso que aparece o se muestra como “involuntario/pero voluntario a su vez” (del hecho de generar nuevos seres) y como voluntario (respecto de no verse contenida -como si buscara una plenitud- en un Ser concreto).
La “pericia” del relato se hallaría en el hecho
de que – aunque el relato no definiera
con precisión que fuere esa “Consciencia/Conciencia” - el oyente del relato, o el lector del mismo,
debería emplear “su propia mente” (como
consciencia/consciente) para hacerse una idea sobre lo que fuera que
quisiera ser dicha “Conciencia/Consciencia”, por lo que le podría remitir “a la
aproximación de la esencia del término” desde la propia experiencia personal. Con
solo escuchar/leer el relato, la persona “podría obtener” una aproximación a la
definición, desde su propia condición de “Ser Humano”:
“La consciencia tomaría conciencia “de sí
misma”, o una nueva forma de “consciencia” al concretarse corpóreamente, y
se alejara de ello, en el momento en que “se viera” (tomara consciencia/conciencia) de verse contenida en vida material
(que por su “condición” de vida material
“es/sería” limitada en algún rasgo o finita) trasladando la idea “de ser”
de “condición antagónica” a la finitud de la existencia material o a las
condiciones limitantes de ser vida material;
pudiendo concebirse el pretendido “temor”, que se relata, apareciera al verse “contenida” en vida material,
“un sentimiento” - como tal temor –
que “nace” por el solo hecho de “ser, verse así misma/o, vida material” y en
alguna manera un “sentimiento limitante” – por
cuanto fuera temor – y parece que pudiera condicionar, de algún modo, sus
cualidades (cualidades que “se mostraran”
“sin principio ni fin”, de “mejor condición” que la existencia material (que por sí se concibe “sensible/dependiente”
de “un medio y finito”); da idea de estar más vinculada con la “eternidad”
(por lo que no cabría el concepto de
“inmortalidad”) en la medida en que “no estando contenida” no podría “dejar
de Ser”.
En el relato, ese
“miedo/vértigo” de la Consciencia/Conciencia,
parecería “las primicias” de lo que conoceríamos como “voluntad” pues “aparece”
la capacidad de “rechazar/migrar/no gustar/” haciendo que la Consciencia adquiriera (o se aproximara a la idea de adquirir)
capacidades llevando, así, a la idea/concepto de “mente”- que posee “cierta” voluntad - como “capacidad” “de hacer algo
determinado” y a su vez dando otra cualidad a la Consciencia que sería la
Conciencia, pues al “sentir/percibir” – por
medio del “temor” – en la forma corpórea en la que se halla, de alguna
manera, no es “adecuada/conveniente/idónea”).
(En alguna medida sugiere que es la Consciencia quien “genera/crea” – tal vez involuntariamente, su propio “continente material”, y no hallándose “conforme” – pues tomaría Conciencia de posibles limitaciones o temores que antes no poseyera - crea otro y otro, y así sucesivamente, buscando “algo” más idóneo. Pero el relato no dice que lo hallara ni lo consiguiera – por lo que abre a la posibilidad de que fuera siguiendo buscando ese pretendido ser-corpóreo perfecto). Al ser la “inmortalidad” celular, de tejidos, posible en laboratorio (y también aparentemente encontrada en la Naturaleza) se sostendría, a su vez, interpretaciones sobre la longevidad inicial del Ser Humano en razones de hallarse el medio Natural en condiciones mucho más óptimas, haciendo posible que los tejidos no envejecieran a la velocidad que lo hace en la actualidad – aún así, también hubieron explicaciones sobre la literalidad de cientos de años vividos por patriarcas bíblicos en razones de que por entonces los años terrestres eran más cortos).
En esta aproximación a lo que fuera que fuere la “consciencia/conciencia”,
esta “rechazaría” “instintivamente” – si
cupiera el término “instintivo” como apropiado - la limitación de existir
materialmente, tal vez señalando que “la materialidad” la limitaría en su
condición esencial de “Consciencia/Conciencia” por lo que, en alguna manera, no
precisara materialidad alguna (donde
sustentarse o anclarse para ser/existir) para ser/existir como tal
“consciencia/conciencia”.
A su vez, existiría “un algo” – indefinido, indefinible – que llevaría - o “arrastraría” o “inclinaría” o “propiciaría” o “precipitaría” - a la “consciencia/conciencia” a “concretarse” en una existencia material – como si se tratara de un fenómeno vinculado a un concepto similar a lo que entendiéramos como “condensación” que haría posible la existía de la “materia” (y siguiendo ese razonamiento, a su vez, la materia viva), configurando la visión que tenemos del Universo y los fenómenos que en dicho Universo concebimos que, a su vez, harían posible la vida – tal y como la conocemos - en nuestro Planeta, dentro del entorno – a su vez infinito - que “definimos” o “concebimos” como Universo.
La Consciencia/Conciencia, así presentada en ese
relato, tuviera “Voluntad” que apareciera más vinculada con el “No deseo” que
con la “voluntad de Desear” dando lugar a la aparición (generación/creación) de los “seres vivos”
(“no deseo”, que fuera casi equivalente a “no conformidad”) –que recuerda al relato bíblico del Génesis, donde la creación avanza en etapas, de Siete días, mostrando conformidad (mediante la frase: “Y vio que era bueno” )
Por lo que parece que esa “Voluntad” fuera
producto de la “Conciencia/Consciencia” - pero
se concibe culturalmente, en occidente, como “mente” ya que “se atribuye voluntad en un objetivo
determinado” y “con un fin y propósito concreto”: “Y vio que era bueno”, aunque
no se explicite su finalidad en el inicio del texto, pero sí consecuencia
adversa al romperse un criterio por medio transgredir una “orden expresa”-
procedente de una entidad que sí se expresaría con claridad como “mente” que
poseyera recursos ilimitados y determinantes).
Desde la perspectiva de la “mente” que poseemos los humanos, se entendiera el concepto de Voluntad – como movilización de recursos al alcance -, pero la mente, como la concebimos ahora, se conformaría como “una abstracción” capaz de evaluar y movilizar los recursos materiales e inmateriales disponibles - que al estar en principio circunscrita a la materia viva, aun siendo ello “una percepción aparente” - “la mente” inicialmente concebiría recursos posibles en razón de hallarse en un cuerpo con vida material limitada. De alguna manera, desde una perspectiva “estrictamente materialista”, difícilmente concebiríamos “una mente incorpórea” que “posea una voluntad” que se enfoque a generar vida material y el motivo de ese objetivo”.
Por ello, es “difícil” concebir que fuera “una
mente” (o “única mente absoluta”) lo
que pudiera hallarse en el “Todo” que nos rodeara, que tomaría
“cuerpo/sustancia” de vida (“accidentalmente”)
estando presente en todo ser vivo que existe.
Resultando más “accesible” considerar que lo que
se pudiera hallar en todo ser viviente fuera “Consciencia/Conciencia” a la que
aludía el primer relato (tampoco se
pudiera descartar plenamente la idea de “mente”, aunque resultaría bastante
inaccesible desde nuestra condición humana, conjeturar la idea de mente
incorpórea, universal con finalidad concreta; en alguna manera, desde nuestra experiencia como seres humanos, la
finalidad concreta debería estar determinada por circunstancias; circunstancias
que difícilmente podemos imaginar en un ser intemporal e ilimitado).
La Consciencia/Conciencia - que tal vez sería Ser/Estar - se hallaría (sin cuerpo, ni forma) pero siendo consciencia/conciencia a la que, de alguna manera, se hiciera ver que todos formamos parte de ella, por lo que siendo así sus cualidades de siempre “Ser y Estar”, “todos retornaríamos” (al “desaprisionarse” de la existencia material que la “limita”, pero aún así, con cierta “inclinación o tendencia” a volver a ser vida material) cuestión que se muestra en prácticamente todos los relatos culturales (tanto cuando hablan de lo que hoy denominaríamos “metempsicosis”, como de “resurrección de la carne” – (o de alguna forma de destrucción en un “último juicio” para aquellos que “hicieran trampas” en el transito del “estado intermedio” buscando “el desbloqueo” para acceder a “Paraísos”).
La cuestión de la “consciencia/conciencia” en los seres animales –quedaría científicamente consensuada en 2012:
El 7 de julio de 2012, científicos prominentes de diferentes ramas de las neurociencias, entre ellos David Edelman del Instituto de Neurociencia en La Jolla, California; Philip Low de la Universidad de Stanford y Christof Koch del Instituto de Tecnología de California, se dieron cita en la Universidad de Cambridge para celebrar la Conferencia Conmemorativa Francis-Crick,3 la cual trató sobre la conciencia en humanos y animales. Al finalizar las conferencias se firmó, en presencia de Stephen Hawking, la Cambridge Declaration On Consciousness4 (Declaración de Cambridge sobre la Conciencia5), la cual resumió los hallazgos más importantes de la investigación allí expuesta y discutida:
"Decidimos llegar a un consenso y hacer una declaración para el público que no es científico. Es obvio, para todos en este salón, que los animales tienen conciencia, pero no es obvio para el resto del mundo. No es obvio para el resto del mundo occidental ni el lejano Oriente. No es algo obvio para la sociedad."
Philip Low, en la presentación de la
Declaración de Cambridge sobre la Conciencia, 7 de julio de 2012
El relato presenta la actividad de la
consciencia/conciencia generando/creando vida; y tal vez también se pudiera
sostener la posibilidad de ser consecuencia de lo que se considerara la
manifestación - de lo que fuera que fuese
el “motivo” de existir o generarse un “orden”- que vincula a la existencia
de un “TODO” (un “Todo” que se muestra
“con claridad” en la confirmación/verificación de ese ordenamiento de “lo
material y lo inmaterial/intangible”, como lo fuera “la Consciencia”).
Materia (vinculado con el concepto de Mente)
“Hacer/generar un orden” sobre “lo que se
concibiera en algunos textos como “nada” – en
un proceso “similar/parecido” a “condesar/precipitar” lo que “solo fuese”,
algo así, como lo que pudiéramos concebir como “energía” o tal vez más sutil
que ello, y cuya aproximación a lo que fuera que fuese podría referirse o estar
vinculado con el término: “potencialidad”; haciendo posible la existencia de
materia (que consideramos “inerte”,
carente de la vida tal y como la conocemos).
como si de un “Ámbito/marco” (– tendencia/precipitación -) previo a
todas las Leyes físicas/químicas, que concebimos, como consecuencia
inmediata/simultánea del “un Big-Bang original” aparecieran, ya, “una”
“potencial bifurcación” (o tal vez varias). Como si se tratara de “precipitación/o
tendencia” que “ordenara a la vez que creara” o que tal vez “mejor expresado”
sería: “a la vez que crea/genera”, “ordena lo creado/generado”, le da sus
propiedades/cualidades” en el “lugar adecuado”; o como consecuencia de esa
“precipitación/o tendencia” crea/genera “lo que fuera necesario” (a un fin o propósito que - en principio - no
se explicita según el relato mítico/cultural tomado de partida; pues es el
relato, que desde su comienzo, y como origen, involucra la idea de conciencia/consciencia
como si se tratara de “un estado” previo, permanente, sin principio ni fin)
y “al ir ordenando crea/genera/ordena “lo posible” de crear/generar” (aunque fuere en estadio “incipiente o proto”)
–como si se tratara “de una exploración” de todas “las oportunidades posibles”
de existencia – en el contexto/marco
derivado de la naturaleza de ese “Big-Bang original” - y que daría sustento y/o “estabilidad”,
permanencia, a lo que se concibe desde
el prisma científico como “proceso evolutivo” (y que a su vez, ya estaría
“establecido” y/o pre-determinado en ese Big-Band que se tomaría como “origen”
del “Todo” – en la rama materialista, pues el relato señalaría “otro origen
diferente” o al menos la señalada “bifurcación” que remitiría a la existencia
previa “de algo” común a nuestra existencia (como vida material) al que nos
aproximamos con el término “Consciencia”.
(con la distancia conveniente a la estrella (Sol) que hiciera posible “madurar” la Tierra hasta ser “receptora” de toda vida potencial que vagara “encapsulada/protegida” por el espacio (incluso también constituyendo la propia materia de la Tierra); con un satélite (Luna) que hace “variable” la existencia del Clima y las Estaciones (haciendo la diversidad de clima, que dan lugar a estímulos y cambios de luz, y oscuridad, y calor) configurándose una atmósfera que va modificándose al interactuar con los principios de la vida material (tal vez vida efímera), que se convirtiera en sustrato de otras vidas efímeras – hasta llegar a la idea de seres unicelulares que ya son capaces de ir almacenando energía – en un proceso dilatado en el tiempo, desarrollando la duplicidad (multiplicación) o replicación de células, así como su adaptación a medios primigenios que podríamos considerar “imposibles para la vida” (medios primigenios, condiciones ambientales, que hablarían de etapas por las que pudiera haber pasado el propio Planeta) en los cuales aún hoy se hallarían (“como en reductos” - como una rama, o posibilidad, de desarrollo de vida que se mantuviera “aletargada”) pero a su vez, siendo pilares esenciales de la existencia de vida en el planeta (tal y como la conocemos) y que han hecho posible no solo su evolución hasta nuestros días, sino que además aseguran – ante cualquier hecatombe apocalíptica que pudiera producirse en el propio planeta – la persistencia de lo “primigenio” de vida material, que podría hacerla resurgir en la Tierra cuantas veces fuera preciso (y que si fuera este planeta desintegrado por circunstancias astronómicas, viajarían esos “primigenios de vida” por el espacio posándose en cualquier otro planeta a la espera de que una estrella cercana lo madure para reiniciar el ciclo de manera indefinida).
La existencia de la “Materia” no fuera, tal vez, tan
previa (como sustancia preexistente sobre
la cual se manifestara la consciencia/conciencia haciendo posible la vida
material, como sugieren Teorías Científicas en la actualidad) sino, tal
vez, con-secuencia de “una” previa, pre-concebida, “actividad” o “estado
previo” que en sí misma(o) tuviera “cualidad simultánea” (en tanto materia como consciencia) cuando se muestra y observa
“ordenador(a)/creador(a)”.
El término “orden”, que
“se diera lugar” – presentado en el
relato simultáneamente a la creación de seres conocidos y muy cotidianos –
no fuera “tan arbitrario” como probablemente se muestra, dado que se supone un
relato dirigido “a iniciar personas” en la introspección/reflexión sobre un
rasgo de sí mismas – la
consciencia/conciencia; otorgándole a la misma una capacidad de creatividad
(observada como dispar y por
consiguiente, tal vez con el propósito de mostrar las cualidades/capacidades de
la consciencia/conciencia “al alcance de cualquiera”).
El orden en que se establece la vida material en el planeta concebimos que no fuera caprichoso (todo parece indicar un proceso de desarrollo) por lo que existe un trayecto que difícilmente se puede concebir como arbitrario (pues de alguna manera se hallaría enmarcado, aunque se hablara de un Universo Infinito o de “n” Universos Infinitos” – como sugerirían las tésis matemáticos), sino más bien “de desarrollo” (pre-concebido por el condicionamiento del desarrollo del propio Universo) de manera ordenada (como posiblemente ocurriera, en un ámbito más reducido, en las distintas etapas por las que pasara la propia atmósfera de nuestro planeta en su propio desarrollo; probablemente, “quedando reminiscencias” – que se pudieran hallar y encontrar - de esas “existencias” en forma de proto-vidas o vidas latentes en los lugares del planeta donde, insospechadamente, aun se mantuvieran esos pequeños ámbitos de condiciones atmosféricas remotas (como pudieran ser lugares donde existe vida que no precisa oxigeno, o lugares que consideramos imposible para la vida, como pudieran ser ambientes sulfurosos o similares); sin alcanzar un estadio previo no se podría establecer el siguiente (sin la existencia y configuración de las células difícilmente podremos hablar de seres pluricelulares que dieran lugar a mayores especialidades en las células hasta dar lugar a seres multi-orgánicos como los vegetales o tan complejos como los mamíferos).
También cabría considerar que “ordenar”, en sus
inicios, no se concibe aquí como una orden (mandato)
en sí misma, sino “como ordenamiento que le es propio/propicio”, evidente por
sí, y consecuente; por ello no parece en nada caprichoso, en sí mismo.
(no tiene que ver con la
idea de “dar órdenes” que, cuando no tuvieran en cuenta el entorno/circunstancias/condicionamientos,
acaban creando lo contrario de lo que en su origen sugiere el término, y que sería
más propio de concebir en la actividad de los Seres Humanos – más vinculado a las capacidades de la Mente, que evaluaría
recursos y posibilidades para actuar sobre sí misma y sobre el entorno, (pudiéndose
concebir, más propio de la mente humana, la idea del “libre albedrío” en el
sentido de poder inter-actuar sobre sí misma, sobre el entorno y sus semejantes,
modificando para “bien o para mal” al producir efectos visibles y constatables en el mundo
material de la existencia). Es probable que cuando en los Escritos Bíblicos
se explicita la creación mediante órdenes taxativas y explícitas pudiera buscar
inducir “al oyente o lector” la “capacidad de la voluntad determinada y
dirigida” como “propiedad” de la Mente (de
igual modo que se usaría similar “método” en el escrito de referencia sobre
cómo comprender e identificar la Conciencia/conciencia en nosotros mismos).
Concebimos en el mundo de la materia que esta se halla en diferentes Estados; tradicionalmente se concebían tres estados de la materia debidos a factores (“externos”) como la presión y la temperatura: Sólido, Líquido y Gaseoso. En el siglo xx, el mayor conocimiento de las propiedades más exóticas de la materia dio lugar a la identificación de muchos estados adicionales de la materia, ninguno de los cuales se observa en condiciones normales. Ver: Estados de la Materia Ver también: Materia
Vida (Consciencia y Mente)
Consciencia/Conciencia en el proceso de
“atraerse/precipitarse” (sin aparente
razón) hacia la materia (materia que
se iría constituyendo tal vez como fenómenos de agregados/precipitados, como se supone la formación de astros hasta configurarse como nuestro Planeta) “sustentándose”
la vida tal y como la conocemos sobre nuestro planeta, una vez este empieza a
adquirir condiciones apropiadas para sustentar vida material.
Siguiendo la idea de “precipitación” (“precipitación” aquí tomada como complejidad difícil de definir, como lo sería el término de “Fuerza de Gravedad” que usara Newton para demostrar la redondez de la Tierra frente a los que aún persistían poniendo objeciones en que fuera la Tierra Plana, aludiendo a que las personas de las antípodas caerían eternamente al vacio), pudiendo ser las “posibilidades y características” que conforman la materia (ya sea considerada viva o inerte) como una “bivalencia”, se diera lugar a “bifurcaciones en la configuración” de “ordenamiento” dando lugar a ARN, ADN… soporte donde se construirían los primeros elementos (virus, que no se consideraban poseedores de vida) desde los cuales (los virus), al parecer, aportarían los materiales ya “ordenados/estructurados” para hacer posible lo que pudieran ser las primeras células (o proto-células) que con su breve inicial existencia, acompañarían la modificación de las condiciones del planeta y a su vez interactuarían en el mismo ambiente del planeta para hacer posible la vida como hoy la conocemos.
Si aplicáramos la teoría de la evolución como concepto más “determinante” para que se genere vida sobre nuestro Planeta, podríamos vislumbrar – siguiendo el criterio de fondo de dicho relato - que la consciencia/conciencia de vida se concretaría en una especie de “condensación” que diera lugar corpúsculos de vida cuya existencia fuera súbita (donde la luz y el calor del Sol resulta el aporte esencial de la energía que precisara toda vida), iniciando un proceso de asentamiento en el medio y adaptación donde (a su vez, existe una “voluntad” de sí existir materialmente, o “verse” precipitada a existir) generando “primicias de estructuras” que fueran dando lugar a los primeros “entes” (virus de 0,00001 mm. que portan ADN/ARN y son las entidades más numerosas que se hallarían en nuestro planeta) cuyo material (ADN/ARN) resulta esencial para la existencia de células (que aún hoy en día siguen infiltrándose en células) que conocemos como propios en los seres unicelulares (unidad básica de la vida material) haciendo viable la prolongación de su existencia y desarrollando capacidades para una “reproducción” más “económica” y sencilla (una vez ya establecida su existencia), más sencilla que el aparente “súbito y breve” sistema inicial de condensación/precipitación (que sería consecuencia del ordenamiento de todo) generándose la multiplicación de células (y los procesos que conocemos como (mitosis/meiosis) y la aparición de seres pluricelulares.
Desde ahí, concebir la especialización de las células en razones ambientales (habitar en el mar, en la tierra), generar órganos pluricelulares donde las células también se especializan apareciendo “tejidos” – en plantas y animales – y a su vez dar lugar a “órganos” que son alimentados por un fluido celular que porta “energía” a cada célula que también se especializan (y cuya composición en animales y plantes de dicho fluido – Sabia y Sangre – es muy similar- casi idéntica en su formulación química y atributos).
La “paradoja” se hallaría en que el Universo que nos contiene - y que se describe científicamente – se concibe, prácticamente, como un entorno “anti-vida”, (tal y como “contemplamos/describimos”, la existencia de vida por medios científicos) y a su vez “contenedor/portador” de los “rudimentos” que la hacen posible e/o incluso de propia vida latente, que solo precisaría “una ventana” de condiciones adecuadas para desarrollarse. (lo cual evoca a su vez el hecho de que en nuestro planeta se halle en el ambiente y casi por doquier, multitud y variedad de formas de vida en estado latente dispuesta a expandirse en cuanto las condiciones sean o fueren apropiadas).
La Comunicación
Cabe precisar, de que las ideas de considerar,
previamente, al Ser Humano “Rey de la Creación” o del “Sistema Evolutivo” ha
podido establecer el convencimiento común de que la “singularidad” del ser
humano es infrecuente, rara y casual en el resto de seres vivos (a veces tomados al resto de los seres vivos
como simples “escalones” previos destinados a hacer posible al Ser Humano) y que la comunicación – como otros rasgos tomados como biológicos
– sea de mayor exclusividad hasta el punto de no concebirse compleja en el
resto de seres vivos. Ello se podría cuestionar (o al menos relativizar), pues la comunicación es un acto, en cierta
manera, destinado a la supervivencia de toda forma de vida. La comunicación parece
muy esencial en la “interpretación del entorno” (“continente”) dentro del cual se haya la vida (como “contenido”) y del que todos, como
seres vivos, somos “dependientes” con independencia de cualquiera de los cinco
reinos que en la actualidad se divide la existencia tomada como vida material.
Como humanos, concebimos la comunicación como “un
mensaje activo” e intencionado hacia el entorno, pero en su origen,
antes de hacerse “complejamente
interesada” (como se pretende mostrar
más adelante), tal vez fueran más bien diferente a como la concebimos en la
actualidad (y más bien pasiva, carente de
“voluntad” inicial de comunicar), como lo fuera percibir “el cambio” del
“estado de los seres” y los fenómenos (tomados
en principio como cosas) que rodean”.
Si hacemos “una reducción” de la idea de
comunicación a su componente que podríamos considerar esencial “de “inter-acción”
con el entorno (como se señalaba en este
artículo/reflexión, cuando aparece los que se pudiera concebir como
primeras primicias de existencia
material, que se va conformando hasta ser célula y desde ahí multiplicarse y
especializarse de manera compleja) podríamos concebir que existiera “una
acción” del entorno por el solo hecho “de ser entorno” y a la vez una condición
“del entorno” que hace posible
concretarse los primeros “elementos materiales” (que nos dicen que fueran ARN y ADN) que serían “estructuras definidas”
y “primicias del material de existir” (hallándose
en manera más o menos encapsuladas) siendo por medio de ese
encapsulamiento, nuevamente contenidas (singularizadas/diferenciadas
del entorno) siendo esa forma de encapsulamiento (que hace idea de aparecer límites donde contener, en forma de cambio de
densidad) como algún tipo de membrana respecto del entorno, “lo que hace
singular” el proceso que se establece en su interior, y a la vez se muestra
como forma/formato generalizado para la existencia de vida; donde la membrana
es una protección que regula la interacción “con el entorno” considerado como
medio
(El propio Planeta Tierra se halla en
forma de “cápsula” que protege las condiciones interiores respecto del entorno;
que a su vez, como entorno, interactúa a través de esa membrana que se muestra
como cápsula (en este caso atmósfera)
siendo esa membrana la que toma del entorno “lo que precisa” para mantener los
estrechos márgenes que hacen viable las condiciones de existencia de vida, evitando que ese mismo
entorno las destruya).
Es decir, estamos ante una paradoja: El entorno (en este ejemplo el Universo) en un
momento determinado (y que se pudiera
considerar, tal vez, poco estable o frágil), hace posible las condiciones
de existencia de vida y cuando estas se concretan (en un lugar: la Tierra), la misma existencia de primicias de vida (aparecen en esas condiciones de ambiente),
y luego como ya vida, interactúa, para hacer estable y perdurable una membrana
(Atmósfera) evitando ser
destruida/degradada y/o ser llevada al estado pro-latente - quedando nuevamente en alguna forma encapsulada como proto-vida.
Ese “formato de encapsulamiento”, que podríamos
llamar “formato/huevo”, es el que se consideraría propio de embriones (donde se prepara y gesta cada nuevo ser)
con aparente independencia de la rama del Reino Animal en la que fuere
clasificado. Si consideramos al Reino Vegetal como una rama de existencia que a
su vez tiene el mismo origen que toda vida, se podría entender que el
encapsulamiento (que dará lugar a nuevos
seres de naturaleza vegetal) no es diferente como tal formato (las semillas, se generan como formato
encapsulado que protege del entorno hasta que se dan condiciones adecuadas);
al igual que el Reino Fungi donde las esporas representan ese encapsulamiento (y si fuéramos al mundo de bacterias
observaríamos el mismo fenómeno/como
procedimiento sencillo en formato de células y las propiedades de estas).
Es decir, la relación del “contenido” con el
entorno “tomado como continente” es “una comunicación” de condición inicial:
pasiva, exclusivamente de receptor (receptor
que selecciona lo que le llega para no ser destruido). Siendo esa condición
“de seleccionar” lo que nos llega del entorno resultara esencial, para no ser
destruido, siendo, al parecer, condición universal.
Es así de tal manera, que todos los seres
vivos toman del “ambiente” (entorno/Continente)
mediante lo que se podría llamar intuición (tomada
como interpretación “de sensaciones” que perciben del entorno) para “prever
o anticipar” cambios en el propio ambiente (entorno/Continente)
y realizar tareas para evitar o amortiguar sus consecuencias. Lo que en sí
mismo resulta una “comunicación” (pasiva, a solo modo de “receptor”) siendo el
ambiente (entorno/Continente) “emisor” que estimula esas mismas sensaciones que
los seres vivos reciben y concretan modificando su actividad o estado.
Ejemplo
que se vio una entrevista con un joven que predijo que iba a haber lluvias
abundantes en este Mayo en contra de la previsiones meteorológicas y siendo que
acertara el mundo científico se le echara encima a pesar de que el joven
explicara, siendo aficionado, cómo hacía las predicciones “contemplando” la
Naturaleza y a seres vivos concretos que tomaba como referencia (referencias que hasta no hace mucho las
tomaba la gente común del campo para prever sus tareas agrarias y que el mundo
de la Ciencia excluyó considerándolas supersticiones y privándonos a todos de
recursos que este joven hubiera puesto de actualidad pese al enojo científico)
las hormigas llevaban tiempo escavando nuevos túneles, que el joven interpretó
(según la tradición) como protección
ante intensas lluvias que podían anegar sus nidos y graneros; las garzas
pasaron por una zona concreta del país (el
joven tiene ahora una red de informadores) y a las pocas semanas se
produjeron intensas nevadas (como decía
la tradición) y se hallara, ahora este joven, buscando comprobar las
relaciones de la influencia de planetas y comprobaciones sobre la luna en su influencia
sobre la atmósfera. Un pariente de Mai predecía el tiempo en su pueblo, además
de ser una figura relevante, según dicen, a la hora de resolver cuestiones (dijo que lo conseguía observando las
terminaciones de los juncos, pero no parece que a nadie revelara explícitamente
todos sus conocimientos).
Es decir, el mundo de la vida tiene la capacidad de prever con antelación las condiciones y cambios que le resultan esenciales para subsistir, mientras que el Ser Humano lo viene fiando a una Ciencia que además de resultar cara en relación calidad/resultados resulta "más falible" por negarse a aceptar actividades de observación complementarias por el hecho de antes haberlas desprestigiado – por poco científicas - para hacerse un hueco que le llevara a ser considerada el nuevo dogma de fe.
Aún esta explicación sobre el formato Universal
de “Huevo/encapsulamiento”, habrá quien diga que existe otras formas de
reproducción, como las que aparecen en el mundo vegetal donde un tramo de
vegetal (una ramita por ejemplo)
puede enraizar sin precisar encapsulamiento. Sin embargo, el encapsulamiento de
las células germinales se halla, en este caso en las yemas, y aunque en
apariencia diferente de las semillas, es una adaptación que fomenta la
existencia del vegetal frente a accidentes sobrevenidos (como el paso de un ser que anda y rompiera parte del vegetal). Si aun así se persistiera en la afirmación de
contradecir señalando que la hierba (considerada
pasto para el ganado) es mordida y sin poseer yemas se regenera, habría que
señalarle que las células de las pantas suelen poseer la cualidad de
transformarse en germinales (similar a
las apicales) por lo que si la planta aún posee suficiente tallo después de
pasar una vaca, las células de sus terminaciones pasan de ser tejido soporte a
la condición de germinales, haciendo crecer la planta y restituyéndola a su
desarrollo.
Las gama “de recursos variados” en que la vida “se abre paso” ante las adversidades del medio son insospechadas para las personas comunes (de naturaleza cada vez más urbana) pero no del todo para la Ciencia que al descubrir las propiedades de las células en animales y seres humanos se ha lanzado a generar tejidos celulares con fines médicos (y también nos dicen con fines alimenticios, aunque resulta evidente que los medios artificiales para generar nutrientes artificiales – cultivo de carne de ternera y luego usar impresoras para darle forma - resultan poco eficientes frente a los empleados por la Naturaleza), como resulta obvio al observar que la Naturaleza emplea con muchísima mayor eficiencia la captación, almacenamiento y puesta a disposición de la energía que usa (con cualquier finalidad) que lo que pudiera hacer el Ser Humano, cuando se separa de los formatos que usa la propia Naturaleza, resultando esos inventos caros y costosos de mantener. Aún así, el uso de la ciencia de las propiedades celulares de los seres vivos animales, y en especial del Ser Humano, ha propiciado el negocio del tráfico de órganos (por lo general de niños) para prolongar la existencia de personajes relevantes o/y multimillonarios que sin escrúpulos sacrifican otras vidas inocentes para prolongar su censurable existencia en este Planeta (pero resulta más común de lo que podamos imaginar cómo se utilizaría la comunicación para destruir vidas, incluso en entornos insospechados, como puedan ser los familiares).
Podríamos concebir así, que la primera
comunicación “transcendente” no sea “verbal” y percibida por medio de los
sentidos (en el caso de los seres del
Reino Animal, que nos resultaría más fácil por semejanza), siendo la que se
estableciera entre el entorno inmediato y el “ser” que lo percibe, destinada a
“verificar la seguridad” en todos sus ámbitos (donde ya se recibe y percibe estímulos del “cuerpo continente”-
estímulos de amplia variedad de gamas que remiten al nuevo “Ser/Estar” que se
halla en un entorno del que es dependiente) y al que seguiría, como
simultáneamente, la contemplación “pasiva” (del
“contenedor” respecto “al contenido”, contenido que es el “ser”) que
permitiría extraer conjeturas destinadas al aprendizaje. Pudiendo argumentar
que este modelo de proceso sería reiterado en el devenir de la existencia de un
ser vivo de la complejidad del Ser Humano.
De alguna manera la primera comunicación en el
existir, tal y como lo concebimos el existir, sería percibir dentro del “huevo
gestante” lo que rodea al “ser” que va a nacer antes de nacer (huevo, tomado aquí como formato/forma donde
se producen los fenómenos destinados a la multiplicación de células,
especialización de estas en tejidos y órganos siguiendo un “plan/proyecto” “predeterminado”);
y a su vez, vislumbrar desde el mismo (huevo
“universal”) lo que hubiera en el exterior por medio de las “sensaciones”
que percibe y le llegarían del propio cuerpo que lo contiene.
Como experiencia individual
de todo ser humano el primer ámbito de estancia es el “huevo universal”, donde
como otros seres que también vienen a esta vida en un formato similar, percibe
el entorno, y así mismo, por medio de los sentidos.
Existiría desde un primer
momento una “comunicación” o “contemplación” en cierta forma pasiva (como “receptor”) de cualquier
comunicación/estímulo que viniera del Continente que le Contiene. Es decir, la
percepción es sensorial/ambiental y visual de reconocimiento de lo visible;
generándose una “recepción” como parte de la comunicación” con el entorno que, con
el tiempo, descubrirá le llevará “a actuar”, en alguna manera y forma, en él (comunicación/interacción).
Existen creencias religiosas que señalarían que el “Ser, antes de Ser corpóreo” vislumbraría la pareja de seres que lo van a concebir – o que lo están concibiendo – y se identificaría con uno de ellos tomando el sexo contrario. También en el mismo ámbito de las creencias “se dice” que existe “voluntad” en nacer, aunque no se sabría en qué tipo de “Ser/como especie” se nacerá. También, dentro del ámbito de las creencias, se concibe que el “Ser” no siempre tomaría “cuerpo” en un momento concreto, sino “indefinido” y variable.
Desde ese punto de vista la Comunicación sería
más relevante considerar la observación/contemplar como “modo de a-pre-hender”;
y ser influido por el entorno en la medida adecuada (para evitar ser destruido por ese mismo entorno). El a-pre-hender (como tomar del entorno) conlleva a la forma más sencilla: “la
Imitación” y la “verificación”.
Desde este punto de vista, la importancia de la
comunicación se hallaría en primer lugar en quien recibe los estímulos
derivados de la misma y no en una pretendida “intención o voluntad” de
comunicar:
(es decir, llueve y por
ese estimulo los seres vivos reaccionan; si además hay truenos y relámpagos
también se producen estímulos en los seres vivos; si un ser vivo canta y al
momento deja de cantar “se produce un cambio en el ambiente” que puede ser
percibido; si un animal muge o grita de determinada manera puede ser percibido
determinando el entorno cómo debe interpretarlo. Si aparece un olor fuerte (y resulta ser producto de vapores y
partículas que se esparcen por el aire, producidos por un incendio) puede
percibirse y resultar un estímulo que modifica a los seres vivos; si el olor
fuera de agua (también partículas en el
aire) podría producir un estímulo determinado. A su vez, el solo hecho de
poder contemplar la existencia del Cielo y el Firmamento puede transmitir un
estimulo y aunque se conciba que “no
hubiera intención” de transmitir un mensaje, este llega y puede ser
interpretado. El hecho de que exista noche y día también transmite un mensaje a
los seres vivos que en razón de ello pueden adoptar una disposición concreta o
disponerse a ella. El que aparezca la Luna en el firmamento y se muestre
cambiante en sus fases, también produce un estímulo si es observada, aunque la
Luna sea un objeto aparentemente inerte y sin voluntad de emitir mensajes).
La sola existencia de “las cosas” o “los
fenómenos” o “de los procesos y manifestaciones vitales” dan lugar a “mensaje”
por el hecho de ser percibidos, al menos con la vista (consciente o inconscientemente) que pueden ser “recibidos o
recuperados, e interpretados” (mensajes
recuperados al poder ser rememorados, recordados por medio de la memoria,
memoria que puede recuperar lo vivido y aparentemente olvidado) estimulando
o condicionando a los seres vivos.
Es decir, los mensajes que pueden llegarnos (así como los que se emiten consciente o inconscientemente
o por solo el hechos de ser cosa/inerte) son percibidos por los sentidos…
que se complementan con la percepción intuitiva.
Para aquellos lectores que aún lo expuesto, duden
de que exista comunicación en todos los seres vivos (entendiendo la vida material orgánica como la entendemos en la
actualidad) y persistir en el “homo-centrismo” “excluyente” se transcribe
el siguiente texto sobre la comunicación:
Las formas no humanas de
comunicación incluyen la comunicación animal y vegetal .
Los investigadores en este
campo a menudo formulan criterios adicionales para su definición de
comportamiento comunicativo. Un ejemplo son los requisitos de que el
comportamiento cumpla una función beneficiosa para la selección natural y que se observe una
respuesta al mensaje. La comunicación animal juega un papel importante
para varias especies en las áreas de cortejo y apareamiento, relaciones entre
padres e hijos, relaciones sociales, navegación, autodefensa y
territorialidad.
En el área del cortejo y el
apareamiento, por ejemplo, la comunicación se utiliza para identificar y atraer
parejas potenciales. Un ejemplo discutido a menudo sobre la comunicación
de navegación es el baile de meneo.utilizado
por las abejas para indicar a otras abejas
dónde se encuentran las flores.
Debido a las paredes celulares rígidas de
las plantas, su comunicación a menudo ocurre a través de medios químicos en
lugar de movimiento. Por ejemplo, las plantas como los árboles de arce liberan los
llamados compuestos
orgánicos volátiles en el aire para advertir a otras plantas de
un ataque de herbívoros .
La mayor parte de la
comunicación tiene lugar entre miembros de la misma especie. La razón es
que su propósito suele ser alguna forma de cooperación, que no es tan común
entre especies. Sin embargo, también existen formas de comunicación
entre especies , principalmente en casos
de relaciones simbióticas . Por
ejemplo, muchas flores usan formas y colores simétricos que se destacan de su
entorno para comunicar a los insectos dónde se encuentra el néctar para atraerlos. Los
humanos también practican la comunicación entre especies, por ejemplo, cuando
interactúan con mascotas.
“comunicaciones” “voluntarias” constatables
(Voluntad y Mente)
(dibujos, representaciones y símbolos; una forma de proto-escritura)
La comunicación “voluntaria” sería aquella que
tiene un objetivo concreto, guiado por la “Voluntad”. Aquí la voluntad no es la
aparentemente inicial que se describe en el relato (cuando la Consciencia/Conciencia siente una especie de miedo al verse
en un cuerpo – vaca – y huye al verse vaca dando origen a otro Ser; esa
Voluntad inicial no sería, así relatada, voluntad con objetivo concreto, sino
Voluntad que reconoce, de alguna manera, lo que “no” esperaba) de tal manera que la Comunicación sí posee
Voluntad concreta en un objetivo; y ello se debería a que ya se hallara como
“Ser Vivo corpóreo” que “percibe el entorno” – Continente- y “emite” un
“mensaje” para ser “recibido” por “otro ser vivo” “receptor” del que concibe que “entenderá” el
mensaje. O simplemente es o fuera mensaje para sí mismo y “recordarlo” en un
futuro concreto o indeterminado. Estamos hablando de que se “concreta
información” que llega del entorno (Continente) en forma de sensaciones, para
lo cual existe una nueva capacidad que hiciera posible esa concreción de
información que se podría definir como ”intuición/o instinto, que lleva a
determinar y conformar la Voluntad para realizar cambios. Todo ello lo
concebimos como una aproximación a la cualidad de “Mente” (expresada como Inteligencia) en la medida de que la mente “gestiona
y concreta” lo que llega a través de los sentidos que se poseen por el hecho de
hallarse en vida material y dispone a la acción a su propio ser en una
dirección concreta para un fin determinado. Por lo tanto Comunicar por Voluntad
sería un acto Inteligente, de por sí, que lleva a transmitir información útil.
(en ocasiones se dice que el reino animal
no posee Mente y lo sustituye por instinto, sin embargo conocemos que seres
animales próximos (como los domesticados) dieran evidencia clara de poseer
Mente al gestionar situaciones concretas con los medios que poseen, por medio
de actos voluntarios).
Es decir, la Mente resultaría más evidente cuanto
más complejo resulten los actos que realizan los seres vivos en relación a sus
semejantes o al ser humano.
El lenguaje como tal sería manifestación de
Consciencia, Voluntad y “Mente” (o Inteligencia/instinto).
Hasta el momento se consideraba que los dibujos
sobre la piedra o en el interior de las cavernas serían representaciones de lo
que se viera como expresión de arte, (el
arte en sí mismo sería simbólico desde un aspecto abstracto, destinado a
producir o estimular sensaciones que pueden interpretarse de manera diferente
por diferentes personas (que actúan como receptores) y que de por sí sería
información/comunicación), incluso con significado ritual, transcendental o
religioso. Sin embargo, recientes investigaciones señalan la existencia de
“información” concreta en los mismos dibujos, por lo que se concibe como
información/comunicación concreta, voluntaria y de utilidad más específica, y de
naturaleza objetiva/neutral; es decir cierta/veraz (cuestión que fuera relevante para desarrollarse, como veremos más
adelante), por lo que se podría considerar “el primer paso” hacia la
escritura tal y como la conocemos.
El Ser Humano, tal como
lo concibe la Ciencia, aparece (bajo el
nombre Homo Sapiens) hace unos 300.000 años, en el continente africano
desde donde se extendería al resto de continentes.
Empezó a dejar huellas de
su presencia con dibujos en cuevas hace
unos, entre 50.000, e incluso más, de los que recientemente se ha
descubierto que contenía información específica y concreta sobre los animales
dibujados para señalar circunstancias concretas sobre ellos. Es decir, no solo
era un dibujo más o menos elaborado (alcanzando
el concepto de “arte” rupestre, como en cuevas como la de Altamira) sino
que también se ha descubierto que algunos poseían información práctica y útil,
lo que en sí mismo señala existencia de “Comunicación/Información” escrita.
1) 2)
2 Encontrados en caparazones de tortuga que
datan de alrededor del 6000 a. C. [6] [7]
En 2003, se encontraron caparazones de tortuga en 24 tumbas neolíticas excavadas en , provincia de Henan , norte de China, con fechas de
radiocarbono del séptimo milenio
antes de Cristo.
El análisis en 2022, dirigido por Bennet Bacon, un arqueólogo
aficionado, [3] mostró que las líneas, los
puntos y los símbolos en forma de "Y" en las pinturas rupestres del Paleolítico
Superior se usaban para indicar el
ciclo de apareamiento de los animales en un calendario lunar ,
las marcas encontradas en más de 400 cuevas de toda Europa se compararon con
los ciclos de apareamiento de los animales con los que estaban asociados,
mostrando una correlación con el mes del año en el que los animales
representados en las pinturas rupestres suelen dar a luz. Las marcas
tenían 20.000 años de antigüedad y eran 10.000 años anteriores a cualquier otro
sistema de escritura equivalente. [4] [5]
Investigaciones que vienen realizándose desde finales del pasado
siglo, han permitido la compilación de un signario nuclear básico de unos
ochenta y ocho signos lineales que fueron usados para grafiar o escribir
secuencias ordenadas que combinan y articulan signos como en cualquier
escritura de signos lineales y geométricos, lo que ha permitido el desarrollo
de una hipótesis sobre el uso de una Escritura Lineal Paleolítica (ELPA)
logofonográfica o glotográfica durante el Paleolítico Superior, al parecer ya
desde tiempos del Auriñaciense, o con mayor probabilidad desde el Solutrense.6.
Se ha
observado el uso de tales signos lineales de una posible escritura lineal
paleolítica no solo en la zona astur-cántabro-aquitana o franco-cantábrica,
sino también en cuevas del sur de la península, concretamente en las cuevas de
la Pileta y Nerja en Málaga.7
En los textos académicos, un petroglifo es un grabado rupestre, mientras que una petrografía (o pictografía )
es una pintura rupestre. [1] [2] En el uso común, las palabras a
veces se usan indistintamente. [3] [4]Se han encontrado petroglifos en
todas partes del mundo excepto en la Antártida ,
con concentraciones más altas en partes de África, Escandinavia y Siberia,
muchos ejemplos de petroglifos encontrados a nivel mundial datan
aproximadamente del Neolítico y del Paleolítico superior tardío (hace aproximadamente 10,000 a
12,000 años).
Existen
muchas hipótesis sobre el propósito de los petroglifos, según su ubicación,
edad y tema. Algunas imágenes de petroglifos probablemente tenían un
profundo significado cultural y religioso para las sociedades que las
crearon. Se cree que muchos petroglifos representan un tipo de lenguaje
simbólico o ritual o estilo de comunicación que aún no se comprende por
completo. Otros, como los
geocontourglyphs , describen o representan más claramente una
forma de relieve o el terreno circundante, como ríos y otras características
geográficas. [ cita requerida ]
Existen
algunos petroglifos de mapas que representan senderos, además de contener
símbolos que comunican el tiempo y las distancias recorridas a lo largo de esos
senderos; otros mapas de petroglifos actúan como marcadores
astronómicos.
Actualmente, los semiólogos y los lingüistas consideran totalmente probado que la escritura es posterior al habla, aunque algunos semiólogos a fines de siglo XX llegaron a suponer que las escrituras son previas al lenguaje verbal articulado humano en dejar rastro de sí en diversos soportes (huellas de manos, muescas, rayas, representaciones más o menos figurativas tal cual se observa en el Magdaleniense), pero tales proto-escrituras no parecen ser indicios de que los textos escritos se anticiparon al habla.
Los sonidos y el lenguaje hablado
El término de sonido aquí se
observa desde el punto de vista de ser percibido por parte de otros seres
vivos. El
sonido tal vez sea uno de los estímulos más determinantes que pueden aparecer
en la Naturaleza y es el soporte de la palabra (y más transcendentalmente, en la cultura cristiana como Verbo,
expresión de Ser/Estar).
Desde el
punto de vista anglosajón de la percepción, el sonido se plantea como
definición con dos respuestas diferentes que, aunque en la perspectiva hispana
resultaría un planteamiento absurdo (porque
el sonido existe y es un hecho, independientemente de que sea o no percibido –
inmediatamente - por un receptor); este concepto resulta relevante como
propio de singularidades culturales, porque facilitan la idea de “poder
ignorar” “lo que no conviniera” tener presente; cuestión que el mundo
anglosajón reproduce con los estímulos del “sentido de la vista” cuando forma
parte de frases culturales “no querer
percibir que en la misma estancia donde se hallan personas hablando se
encontrara un elefante, por lo que pro-siguen en su actividad ignorándolo”.
En ese sentido el diccionario Webster de 1936 define sonido:
1. Psicofísica:"La sensación de oír, lo que se escucha”. “Sensación
debida a la estimulación de los nervios auditivos y los centros auditivos del
cerebro, generalmente por vibraciones transmitidas en un medio material ,
comúnmente aire, que afecta el órgano de la audición".
b. Física “Energía vibratoria que ocasiona tal sensación”. “El sonido
se propaga por perturbaciones vibratorias longitudinales progresivas (ondas de
sonido)." [15]
Por lo que la respuesta correcta a la pregunta: "si un árbol
cae en el bosque sin que nadie lo escuche caer, ¿hace ruido? " es "sí" y "no", dependiendo de si se
responde utilizando la definición física o psicofísica, respectivamente.Ver: Sonido
Quedaría claro, así, que para el
mundo anglosajón lo relevante y prioritario es que el sonido se escuche, o no,
siendo secundario el hecho real por el cual se produce sonido, pues el mismo
artículo de wikipedia en inglés señala como correcta la doble interpretación de
existir sonido dependiendo de si es escuchado o no (esta “posición” tiene relevancia social determinante) pues
comunicar como emisor es un acto
voluntario que persigue una finalidad concreta, que a veces puede consistir en
una “reclamación” vital.
Los sonidos son percibidos a través del aparato auditivo que recibe las ondas sonoras, esta habilidad se tiene incluso antes de nacer.
(El Lenguaje y la Lengua)
La comunicación existe en la Naturaleza, y cuando detectamos unos códigos que permiten comunicación con el entorno, el medio o los semejantes, hablamos de lenguaje, que no se debería confundir con lengua entendida como idioma humano.
La existencia de códigos en la Naturaleza resulta sorprendente, pues son verificados matemáticamente, a veces como constantes. Descubrir códigos en la existencia es como descubrir los medios por el cual el Universo concreta la existencia de vida, y aun así no explica el motivo o sentido de la misma, pero sí “hace ver” la existencia de una inteligencia (Mente) que los hace posible como “mensaje” que a veces es destinado a generar vida definiendo sus rasgos.
Un lenguaje (del provenzal lenguatge1 y del latín lingua)
es un sistema de comunicación estructurado
para el que existe un contexto de
uso y ciertos principios combinatorios formales. Existen contextos tanto
naturales como artificiales.
La palabra Lenguaje se
utiliza a veces para referirse a códigos , cifrados y otros tipos de sistemas de
comunicación construidos artificialmente , como lenguajes
informáticos formalmente definidos que se utilizan para la programación
informática . A diferencia de los lenguajes humanos
convencionales, un lenguaje formal en
este sentido es un sistema de signospara
codificar y decodificar información .
Este artículo se refiere específicamente a las propiedades del lenguaje humano natural tal como se estudia en la disciplina de la lingüística .
Los seres humanos
desarrollan un lenguaje simbólico complejo que se expresa con secuencias
sonoras y signos gráficos. Por su parte, los animales se comunican a través
de signos sonoros,
olfativos y corporales que en muchos casos distan de ser sencillos.
Los debates sobre la naturaleza y el origen del lenguaje se
remontan al mundo antiguo. Filósofos griegos como Gorgias y Platóndebatió la relación entre las palabras, los conceptos
y la realidad. Gorgias argumentó que el lenguaje no podía representar ni
la experiencia objetiva ni la experiencia humana y que, por lo tanto, la
comunicación y la verdad eran imposibles. Platón sostenía que la
comunicación es posible porque el lenguaje representa ideas y conceptos que
existen independientemente y antes del lenguaje. [12]
Durante la Ilustración y
sus debates sobre los orígenes humanos, se puso de moda especular sobre el
origen del lenguaje. Pensadores como Rousseau y Johann Gottfried
Herder argumentaron que el lenguaje se había originado en la
expresión instintiva de las emociones y que originalmente estaba más cerca de
la música y la poesía que de la expresión lógica del pensamiento
racional. Filósofos racionalistas como Kant y René Descartessostuvo la opinión
opuesta. A principios del siglo XX, los pensadores comenzaron a
preguntarse sobre el papel del lenguaje en la configuración de nuestras
experiencias del mundo, preguntándose si el lenguaje simplemente refleja la
estructura objetiva del mundo o si crea conceptos que a su vez imponen una
estructura a nuestra experiencia. del mundo objetivo. Esto llevó a la
pregunta de si los problemas filosóficos son realmente en primer lugar
problemas lingüísticos.
El lenguaje resulta relevante para las sociedades, el estímulo
en la crianza, la creatividad y la diversidad.
Al ser un acto de comunicación expresa y con Voluntad resulta
estímulo esencial para potenciar capacidades y desarrollo.
Las teorías humanísticas
consideran que las personas tienen un papel agente en la construcción social del
lenguaje. El lenguaje es visto principalmente como un fenómeno
sociocultural. Esta tradición enfatiza la cultura, la crianza, la
creatividad y la diversidad. [7] Un enfoque racionalista clásico del
lenguaje proviene de la filosofía Siglo de las Luces .
Los filósofos racionalistas,
excluyendo a Jean-Jacques
Rousseau , quien defendía el innatismo , creían que las personas
habían creado el lenguaje en un proceso paso a paso para satisfacer su
necesidad psicológica de comunicarse entre sí.
Así, se piensa en el lenguaje como una invención humana racional . [11]
Al parecer, solo el mundo de los primates concebiría
formas complejas de comunicación sonora (como
lenguaje/habla) destinadas al engaño y a la falsedad, por motivos
estrictamente egoístas.
(En este último grupo, el Homo Sapiens, es capaz de usar el engaño y la comunicación falsa y falseada incluso con su propia prole o parientes o sociedad a la que pertenece, con el fin de objetivos egoístas - capacidad de otros primates que así se comportarían -, llegando a buscar el daño, la muerte o desaparición del pariente o semejante, a solo esos fines egoístas, que se conciben - a la sensibilidad transcendente humana – como actividad muy cruel, pero recurrente)
En este sentido cabría señalar que los sistemas
de comunicación “en manos de los primates” tienden muy frecuentemente a no ser
fiables y son francamente cuestionables cuando más complejos y desarrollados
son los recursos de comunicación empleados y, a su vez, más y mejor se conocen
los anhelos, deseos, objetivos y (consecuentemente)
“dependencias” o desarrollo de “conceptos y herramientas objetivas”, como
información honesta y veraz (para
conseguirlos), como se verifica cuando aparece el lenguaje hablado.
Los signos vocales animales
son en su mayor parte intrínsecamente fiables. Cuando un gato ronronea, la
señal constituye una evidencia directa del “estado de contento” del animal.
Podemos "confiar" en la señal no porque el gato esté inclinado a ser
honesto, sino porque no puede fingir aquel sonido. Pero así mismo una perdiz
puede fingir que cojea ante la presencia de cazadores humanos (con escopeta) para
alejarlos del nido.
Los gritos vocálicos de los
primates pueden ser ligeramente más manipulables, pero permanecen fiables por
el mismo motivo - porque son difíciles de
fingir.42
La inteligencia social de los
primates es "maquiavélica" - egoísta y sin restricciones de los escrúpulos morales. Los monos y
simios a menudo intentan engañarse el uno al otro, mientras a la vez permanecen
constantemente pendientes de no caer víctimas de su mismo engaño.43
Paradójicamente, si
consideramos el lenguaje una evolución, es precisamente la resistencia de
los primates al engaño la que bloquea la evolución de sus sistemas de
señales hacia el camino proto-lingüístico (porque
precisamente no sería fiable). La lengua se tiende a excluir de la
evolución de los primates porque el mejor camino para procurar no engañarse es
ignorar “todos los signos” salvo aquellos que son “inmediatamente
identificables” (por estar vinculados al
instinto). Las palabras automáticamente suspenden esta prueba.44
Las palabras son fáciles de
fingir. En caso de que resulten ser mentira, los oyentes se adaptarán
ignorándolas a favor de los indicios o señales difíciles de fingir. Para que el
lenguaje funcione los oyentes tienen que confiar en que aquellos con quienes
hablan generalmente tiendan a ser honestos.45
Por este motivo, la lengua y el lenguaje (concebido como proceso evolutivo que alcanza gran complejidad) precisaría presuponer niveles relativamente altos de confianza mutua con el fin de permanecer estable en el tiempo, para así generarse un proceso evolutivo que lo haga más complejo y estable. Esta teoría de proceso evolutivo del lenguaje, que precisa niveles altos de confianza (para dar origen al lenguaje) tendría que explicar por qué los humanos pudieron empezar a confiar en “señales vulgares” (como las palabras o sonidos concretos) de una manera que los otros animales aparentemente no pueden . Ver: Origen del Lenguaje.
Las estimaciones del número de lenguas humanas en el mundo varían entre 5.000 y 7.000. Las estimaciones precisas dependen de una distinción arbitraria (dicotomía) establecida entre lenguas y dialectos . [2] Los lenguajes naturales son hablados , firmados o ambos; sin embargo, cualquier idioma se puede codificar en medios secundarios utilizando estímulos auditivos, visuales o táctiles , por ejemplo, escribir, silbar, hacer señas o braille . En otras palabras, el lenguaje humano es independiente de la modalidad , pero el lenguaje escrito o de señas es la forma de inscribir o codificar el habla o los gestos humanos naturales.
· El lenguaje humano se apoya en la
capacidad de comunicarse por medio de signos lingüísticos (usualmente secuencias
sonoras y signos gráficos,
pero también con gestos en el caso de las lenguas de señas). En cuanto a su desarrollo,
el lenguaje humano puede estudiarse desde dos puntos de vista complementarios:
la ontogenia y
la filogenia.
La primera analiza el proceso por el cual el ser humano adquiere el lenguaje,
mientras que la segunda se encarga de estudiar la evolución histórica de una
lengua.2
La antropología del lenguaje hace del lenguaje una pieza clave en su
interpretación del ser humano, si bien esto no es extremadamente novedoso,
remite a antiguas y variadas tradiciones culturales desde tiempos muy lejanos
en la historia de occidente.nota 1. 3
· La comunicación animal se basa en el uso de señales
visuales, sonoras y olfativas, a modo de signos, para señalar a un referente o
un significado diferente de dichas señales. Dentro de las formas de
comunicación animal (popularmente denominadas lenguaje animal)
están los gritos de alarma, el lenguaje de las abejas, etc.
La Escritura como Voluntad concreta
Posiblemente, el lenguaje precisara de ser
verificado como cierto y ello derivara en potenciar la escritura y su
complejidad, que como escritura es de cualidad diferente al lenguaje, pero a su
vez lo desarrolla (como ocurre en el
presente en los aprendizajes actuales), y tiene fiabilidad al permanecer y
poder revisarse y recordarse.
Por
ejemplo, para explicitar leyes-ordenes que presuponen castigos y por ello se
escriben para conocimiento de todos, y para ese conocimiento se expresara en
símbolos apareciendo la escritura y posteriormente la enseñanza de la lectura
básica. También para realizar transacciones se utilizarían signos complejos que
permitieran establecer cantidades y precios sin depender de la palabra (cuyo soporte fuera el aire y luego la memoria de
cada cual) y si no hubiera confianza entre los contratantes (o uno de ellos falleciera) difícilmente
s e podría apelara a los términos de un acuerdo, para hacerlos prevalecer sobre
un tercero.
La tablilla de Kish , fechada en el 3500 a. C., refleja la etapa de protocuneiforme , cuando lo que se convertiría en la escritura cuneiforme de Sumer aún estaba en la etapa de protoescritura. A fines del cuarto milenio a. C., este sistema de símbolos se había convertido en un método para llevar cuentas, utilizando un lápiz de forma redonda impreso en arcilla blanda en diferentes ángulos para registrar números en tablillas de arcilla y fichas de contabilidad . Esto se aumentó gradualmente con escritura pictográfica utilizando un lápiz afilado para indicar lo que se estaba contando. La etapa de transición a un sistema de escritura propiamente dicho tiene lugar en el período Jemdet Nasr (siglos 31 al 30 a. C.).[ cita requerida ]
Tablilla de piedra caliza de Kish (Sumer) con escritura pictográfica, 3500 aC; puede ser la escritura más antigua conocida.
La escritura
apareció por primera vez en el Cercano
Oriente a
principios del tercer milenio antes de Cristo. Se atestigua un número muy
limitado de idiomas en el área antes del colapso de la Edad del Bronce y el surgimiento de la
escritura alfabética :
La existencia de un habla o idioma del pasado se
constata por la existencia de documentos escritos o supervivientes que
demuestren su existencia.
Un registro escrito puede
codificar una etapa de un idioma correspondiente a una época anterior, ya sea
como resultado de la tradición oral o
porque la fuente más antigua es una copia de un manuscrito más antiguo que se
perdió. Una tradición oral de poesía épica normalmente puede salvar
algunos siglos y, en casos raros, más de un milenio. Un caso extremo es
el sánscrito védico del Rigveda : las primeras partes de este
texto datan de c. 1500 aC, [1] mientras que los manuscritos
más antiguos que se conocen datan de c. 1040 d.C. [2] De manera similar, los
textos avésticos más
antiguos , los Gathas, se cree que se
compuso antes del 1000 a. C., pero los manuscritos avésticos más antiguos datan
del siglo XIII d. [3]
Una lista de idiomas ordenados por edad del texto existente más antiguo que registra una oración completa en el idioma. No incluye sistemas de escritura no descifrados , aunque existen varias afirmaciones sin amplia aceptación que, de ser comprobadas, harían retroceder la primera atestación de ciertos idiomas. Tampoco incluye las inscripciones que consisten en palabras aisladas o nombres de un idioma. En la mayoría de los casos, alguna forma del idioma ya se había hablado (e incluso escrito) considerablemente antes de las fechas de las primeras muestras existentes que se proporcionan aquí.
De la
Escritura al Libro.
La
escritura es el invento más notable de la humanidad que conllevó un largo
proceso de evolución desde sonidos ilegibles y gestos hasta la palabra, el
instrumento que mejoró la comunicación que a su vez propició la invención del
libro escrito, y así el hombre aumento su capacidad de memoria y aumentó su
bagaje intelectual.6
Sabemos de los “primeros libros”
que se pudieran considerar como tal (Epopeya de Gilgamesh) y merece ojearlo – al menos en su síntesis/resumen -, pues ya en aquellos milenios
atrás, se clamaba al Cielo (a los dioses)
para librarse de un tirano (y los dioses,
aunque escucharan “pretendiendo poner
medios”, en este caso, no parece que
dieran con la solución acertada según el relato rescatado).
Sin embargo también “se consideran” Libro lo que
nos llegara antes de ser escrito y fuera oral conocido, como el Cantar de gesta.
El libro más primitivo es el
que carece de soporte material, es decir, el libro oral que incluso existieron
antes de la escritura, tomaron formas de poemas, frases con medas rítmicas,
características que facilitaba su memorización. Se utilizó para la transmisión
de cosmogonías, mitos, normas religiosas, códigos legales y poesía, que con la
invención de la escritura algunos fueron trasladados a soportes y han podido
llegar hasta nuestros tiempos.
El libro antiguo, evidentemente ligado a la tradición oral de los pueblos produjo obras incluso en la Europa Medieval con los cantares de gesta que eran recitados para el pueblo por los juglares en las lenguas vernáculas cuando la escritura se utilizaba sólo para el latín en los libros litúrgicos.6
Los antiguos libros y relatos sobre los “inicios” de la Humanidad, se consideran una “orientación” inicial (de naturaleza simbólica, no siempre precisa, indeterminada, con lenguaje no siempre explícito, a veces confuso o contrapuesto a otros episodios contiguos, que a veces se toma literalmente sin por ello perder cualidades. Con el tiempo “se relativizan”, se cuestionan, e incluso “se desechan” o marginan ante el devenir vertiginoso de las circunstancias cotidianas, donde los relatos no parecen tener utilidad práctica). Suelen contener una parte dedicada a la descripción de la existencia (la vida y su origen) y otra para “conducirse” en esta existencia (mostrando la trayectoria de un Pueblo y/o de un/a saga/ de Rey-es y/o de un Ser excepcional) que serían “referencias” de cómo la actividad en las sociedades actuaría sobre “las singularidades excepcionales o diferentes” (que Ortega y Gasset describiera en sus conferencias en el extranjero, de cómo se solía tratar a los “diferentes”). Por lo cual suelen aparecer también dichos, admoniciones y advertencias destinadas a preservar la propia existencia y en muchas ocasiones, ese porfiar ante la adversidad sería premiada con “promesa” a futuro, por la existencia de un Mundo sin necesidades (o todas cubiertas) concebido como Paraíso - y que pudiera considerarse como la “liberación de Consciencia/Conciencia” después de la experiencia como vida material, sin “deseo alguno”, “ni existencia de “inercia-precipitadora” de volver a ser vida material.
Por lo general, esa orientación –
de “entender” donde se halla y qué es lo
que rodea al nuevo ser que nace en un cultura - era oral; la orientación
escrita (que pudiera ser examinada y
re-leída) iba destinada hacia aquellos que “ya sabían leer” – leer, por lo que sabemos, no estaría
siempre al alcance de toda la población (En España a inicios de 1800 más del
90% de la población no sabría leer).
Las Escrituras de Referencia en Occidente
Se reconoce que las Sagradas Escrituras, y en
especial el Antiguo Testamento, vinculado con el pueblo de Israel (como pueblo elegido) es/ha sido/sigue
siendo determinante en la concepción de Occidente. Por lo que analizar la
evolución del Pueblo Elegido parece referencia más próxima ya que sus libros y
su historia han sido referencia e influencia en el mundo Heleno y Romano, y con
posterioridad en todo Occidente, determinando las formas de Gobiernos, la
homo-centralidad de la existencia de la vida, y el concepto de Origen de Todo
lo existente, a la vez que la existencia eterna de una Mente Creadora que rige
toda existencia.
Para concebir esa influencia podríamos señalar
por ejemplo la forma de gobierno, pues es un reflejo del Pacto con Dios del
Pueblo de Israel.
Se consideró la monarquía como forma ideal de
gobierno que imitaba el modelo del Universo (creado por Dios); era la forma de gobierno de los antiguos hebreos
(la base bíblica cristiana) que
influiría en la cultura Helénica y en el posterior Imperio Romano; siendo el
Imperio Romano quien influiría en el modelo de gobierno de los pueblos que
sucedieron a Roma desde el S.IV.
Cabe una
aproximación a la forma de gobierno adoptada mayoritariamente en Europa hasta
la Revolución Francesa, pues existiría la voluntad de vincularse al modelo del
pueblo hebreo como la forma de gobierno que reflejaba el pacto con la
divinidad. Siendo el Templo de Jerusalén
un símbolo de ese pacto (que Felipe II
imita en la construcción del Escorial).
La
representación directa y visible de Dios, que toma el Pueblo hebreo como Rey,
es retomada por Inglaterra cuando se separa del Papa y constituye la Iglesia Anglicana.
El Pueblo de Israel
(Pueblo elegido y referencia Occidental)
Habiendo descrito previamente conceptos sobre “el
Origen” se puede abordar de manera somera parte de lo que se conoce, como
contrastado por la Historia, del Pueblo de Israel, a fin de hacerse una pequeña
idea que difícilmente alcanzará la trascendencia que pudiera tener en toda
Europa. Empezando por la etimología de su nombre:
Ἰσραήλ , Israēl , 'El (Dios) persiste/gobierna', aunque después de Oseas 12:4 a menudo se interpreta como 'lucha con Dios') [32] [33] [34] [35] en estas frases se refiere al patriarca Jacob quien, según elBiblia hebrea , se le dio el nombre después de que luchó con éxito con el ángel del Señor. [36] Los doce hijos de Jacob se convirtieron en los antepasados de los israelitas , también conocidos como las Doce Tribus de Israel o Hijos de Israel . Jacob y sus hijos habían vivido en Canaán , pero el hambre los obligó a ir a Egipto durante cuatro generaciones, con una duración de 430 años, [37] hasta que Moisés , tataranieto de Jacob, [38] condujo a los israelitas de regreso a Canaán durante el " éxodo". El artefacto arqueológico conocido más antiguo que menciona la palabra "Israel" como un colectivo es la estela de Merneptah del antiguo Egipto (que data de finales del siglo XIII a. C.). [39]
La Historia comprobada por la Ciencia, hasta la
fecha, remite al ámbito de los cananeos para establecer en Egipto la existencia
de una estela datada sobre el 1.200 Ad C. donde aparece el nombre de Israel:
Los cananeos están arqueológicamente
atestiguados en la Edad del Bronce Medio (2100-1550
a. C.). [44] Durante la Edad del Bronce Final (1550-1200
a. C.), gran parte de Canaán formó estados vasallos que pagaban tributo
al Nuevo Reino de Egipto . [45] Como resultado del colapso
de la Edad del Bronce Final , Canaán cayó en el caos y el
control egipcio sobre la región se derrumbó por completo. [46] [47] Hay evidencia de que centros
urbanos como Hazor , Beit She'an , Megiddo , Ekron , Ashdod yAshkelon fueron dañados o
destruidos. [48]
Un pueblo llamado Israel aparece por primera vez en
la estela de Merneptah ,
una antigua inscripción
egipcia que data de alrededor del año 1200 a. [49] [50] [51] [52] Se cree que los antepasados
de los israelitas incluyeron antiguos
pueblos de habla semítica nativos de esta área. [53] : 78–79 De acuerdo con
el relato arqueológico moderno, los israelitas y su cultura se separaron de los
pueblos cananeos y sus culturas a través del desarrollo de una religión monolatrista distinta —y luego monoteísta— centrada en Yahweh . [54] [55][56] Hablaban una forma arcaica del idioma hebreo , conocida como hebreo bíblico . [57] Casi al mismo tiempo, los filisteos se asentaron en la llanura
costera del sur . [58] [59]
La arqueología moderna ha
descartado en gran medida la historicidad de
la narración en la Torá sobre los patriarcas , el Éxodo y las historias de conquista
descritas en el Libro de Josué ,
y en cambio considera que la narración constituye el mito nacional de los israelitas . [60] Sin embargo, algunos elementos
de estas tradiciones parecen tener raíces históricas. [61] [62] [63]
A pesar de esos descartes de la ciencia actual
sobre parte de la Historia de Israel, aunque existe debate, existiera el Reino
de Israel y Judá sobre el 900 y 850 a.C.
Los libros que influirían en Occidente:
Génesis es el
primer libro de la Torá o Pentateuco y, por tanto, también es el primer libro del Tanaj judío y del Antiguo Testamento de
la Biblia cristiana. En hebreo los libros del Pentateuco se conocen por su primera
palabra, así que para los hebreos este libro es Bereshit («En
el principio»). El Génesis es un relato de la creación del mundo, de la historia temprana de la humanidad y de los
antepasados de Israel y los orígenes del pueblo judío.1
El Libro del Génesis (del griego Γένεσις , Génesis ; hebreo: בְּרֵאשִׁית Bəreʾšīt ,
"En [el] principio") es el primer libro de la Biblia hebrea y del Antiguo Testamento cristiano . [1] Su nombre hebreo es el mismo
que su primera palabra , Bereshit ( "En el
principio" ). Génesis es un relato de la creación
del mundo , la historia temprana de la humanidad y de los
antepasados de Israel y los orígenes del pueblo judío . [2]
La tradición acredita a Moisés como el autor del Génesis ,
así como de los libros de Éxodo , Levítico , Números y la mayor parte de Deuteronomio ; sin
embargo, los eruditos modernos, especialmente a partir del siglo XIX en
adelante, ubican la autoría de los libros en los siglos VI y V a. C., cientos
de años después de que se supone que vivió Moisés. [3] [4]
Con base en la interpretación científica de la evidencia arqueológica , genética y lingüística, la mayoría de los estudiosos de la Biblia consideran que Génesis es principalmente mitológico en lugar de histórico .
Abraham, como primer referente (patriarca) junto
a Isaac (hijo) y Jacob (nieto) que tuvo doce hijos que fundaron las doce tribus
de Israel.
Según la Biblia, el nombre
significa 'padre de multitudes', sin embargo el nombre se divide en ab 'padre',
y ram 'alto, excelso'. Según el relato del Génesis, Dios le
otorgó a un hombre llamado Abram, o Abrán, el nombre de Abraham,
'padre de una multitud de gentes', derivado de ab-hamón.11 La semejanza puramente externa
entre raham y hamón demuestra que el
propósito del autor del Génesis no era dar una etimología, sino producir en el
lector una determinada asociación de ideas.
Abraham fue el padre de Ismael e Isaac, considerándose según la tradición bíblica el fundador del judaísmo. Jacob, hijo de Isaac y nieto de Abraham, tuvo doce hijos que fundaron las doce tribus de Israel. El pueblo judío se considera descendiente de Judá y Benjamín, ambos bisnietos de Abraham. De la línea de Judá descendieron los reyes David y Salomón. Judíos, cristianos y musulmanes perciben en Abraham al Padre de los Creyentes.
Siendo
que lo relevante fuera el relato que tiene como tradición el Pueblo Elegido, en
su vínculo y pacto con Dios, se podría observar esta evolución de creencias de
las que se posee “conocimientos” científicos.
Aparece el término “Iahvé” que fuera tomado como único Dios; sin embargo se sabe en la actualidad que antes de llegar a la consideración de una única divinidad, este pueblo pasó por etapas previas donde había más dioses.
Yahvismo es el
nombre dado por los eruditos modernos a la religión del antiguo Israel . [1] Era esencialmente politeísta ,
con una plétora de dioses y diosas . [2]
Al frente del panteón estaba Yahweh , el dios nacional de
los reinos israelitas de Israel y Judá , con su
consorte, la diosa Asera , [3] y dioses y diosas de segundo
nivel como Baal , Shamash , Yarikh , Mot, y Astarté ,
cada uno de los cuales tenía sus propios sacerdotes y profetas y
contaba con la realeza entre sus devotos. [4] [5] Incluía festivales , sacrificios , votos
, rituales privados y la adjudicación de
disputas legales . [6]
Contrariamente
a la imagen presentada en la Biblia hebrea , el Templo de Jerusalén no
era el único templo de Yahvé, ni siquiera el más importante, [7] sino que el rey era la cabeza
de la religión nacional y, por lo tanto, el virrey en la Tierra de el dios nacional, [8] papel que se reflejaba cada año
cuando presidía una ceremonia de entronización de Yahvé en el Templo Sagrado
de Jerusalén . [9]
El yahvismo experimentó varias remodelaciones y re-contextualizaciones,
ya que la noción de divinidades distintas o comparables a Yahvé fue degradada
gradualmente por nuevas corrientes e ideas religiosas. Durante el período
monárquico ( siglos X a VI a. C.) de mediados de la Edad del Hierro , la religión de Israel
se movió hacia la adoración exclusiva de
Yahvé; sin embargo, estos cambios teológicos inicialmente permanecieron en
gran medida confinados a pequeños grupos, [10] solo se extendieron a la población
en general durante la turbulencia política generalizada de los siglos VII y VI
a. C.
La evolución progresiva hacia el monoteísmo finalmente culminó con el
final del exilio babilónico.a
fines del siglo VI a. C., y en el siglo IV a. C., el yahvismo se había
fusionado en lo que ahora se conoce como el judaísmo del
Segundo Templo . [11] y también dio origen al samaritanismo . [12]
El judaísmo es considerado por los judíos religiosos como la expresión
del pacto que Dios estableció con los israelitas, sus antepasados. [8] Abarca un amplio cuerpo de
textos, prácticas, posiciones teológicas y formas de organización.
Tiene sus raíces como una religión organizada en el Medio Oriente durante la Edad del Bronce . [4] que evolucionó a partir del yahvismo , la religión del antiguo Israel y Judá , a fines del siglo VI a. C., [5] y por lo tanto se considera una de las religiones monoteístas más antiguas. [6] [7]
Fragmento hallado en la Península del Sinaí, datado entre 770 y 801 que contiene la inscripción: " Yahweh y su Asherah" (como esposa y/o Diosa de la Fertilidad)
El pueblo
de Israel (de donde nace el cristianismo
y los primeros relatos que señalan la existencia del primer Hombre en el
Paraíso, la primera mujer y los primeros hijos, evolucionando hacia el Pacto
con Dios y las formas de gobierno) proviene de una evolución más compleja
de lo concebido popularmente.
Esos
relatos se tomaron como ciertos (ya
fueran literalmente o simbólicamente) pues la Ciencia ha ido designando con
nombres bíblicos muchos de su hallazgos, cuando ha ido remontándose al pasado
en busca del Origen de Todo, tanto en el ámbito genético: (Adam y Eva
mitocondrial: Adán cromosómico o Adán cromosómico-Y habría sido un hombre africano (homólogo de
la Eva mitocondrial) que en la evolución humana correspondería al ancestro común más reciente humano masculino que poseía el cromosoma Y del cual descienden todos los «cromosomas Y»
de la población humana actual) como cuando explora el Universo.
De alguna manera la literalidad de la Biblia conservaría una aproximación
a la Verdad aunque no se pueda precisar si en algunas ocasiones fuera simbólica
o literal
Por ejemplo, cuando se habla del Jardín del Edén se podría tomar como una
literal experiencia destinada a encontrar una perfección en la existencia Humana,
observando la evolución y necesidades de un primer Ser en un lugar donde “no le
faltara de nada”. Aún así existen dos
relatos diferentes donde apareciera Lilhit como primera mujer que lo abandona,
no sabiéndose si la experiencia hubiera de repetirse ante aquella consecuencia
con otro Ser Humano diferente pero con el mismo nombre, para reiniciar la
experiencia.
La expulsión del Paraíso también mostraría el primer asesinato de la Historia en razones de envidias de Caín sobre Abel, ambos hermanos.
Algunos de esos libros fueren
confeccionados por medio de “rollos” de pergamino
“descubiertos” – en ocasiones “accidentalmente”
La
“accidentalidad” también es objeto de perspectiva pues si algo “se guarda” o
“se pierde” en lugares determinados, limitados – como es y lo fuera el propio
planeta” - la posibilidad de hallarlos en un plazo de tiempo indeterminado
resultaría, en ocasiones, una posibilidad de certeza; certeza “en manos” de las
reglas que regirían “el destino” en un entorno “limitado”, siendo “el destino”
– a su vez - un atributo propio de cómo se concibiera la propia existencia de
la humanidad, su papel “relevante”, y convicción, en relación con la existencia
de la propia vida en el propio planeta (única
referencia perdurable en el tiempo).
Libros que hablan del “el comienzo de la
existencia” y de la cultura Humana y su devenir (siguiendo las vicisitudes y peripecias de una sola familia “original”
– de la que llegaría a enumerarse sus
descendientes - y de los avatares de su existencia a través de los tiempos,
dando lugar a las sociedades contemporáneas). Poseían “consejos” para
conducirse en la existencia y también consejos para “conducir” grupos o sociedades
(por lo que se pudiera concebir que en
principio también fueran destinados para personas cultas).
El propósito de los mismos libros fuera
“orientar” a quien los leyera, trasladar una experiencia a “otros” que
vinieren.
Cuando se establece “un punto de comienzo” de la condición de Ser
Humano se establece a su vez “la referencia de la propia existencia común” – como sociedad – en una comunidad, por lo
que ello resulta, de alguna manera, relevante o determinante, porque determina
costumbres, normas, leyes, valores éticos y morales… que permiten desenvolverse
por el “espacio del terreno social”. En alguna manera, moverse por “el
espacio/terreno social” precisaría de “orientación” positivamente consecuente.
Escritos que fueron “ocultados/guardados” bajo el anhelo/certeza de
poder “ser descubiertos” y recuperados cuando fuere “necesario/oportuno” por
“alguien” que fuera guiado por la “mano del destino”. Cabría conjeturar si
quienes los ocultaran vivieran “épocas oscuras” de persecución, o en entornos
sociales adversos a esos mensajes o conocimiento concreto o fueran “fines de
etapa”. También el uso del material empleado o el lugar elegido, mostraría la
“voluntad” o “determinación” para que esos “mensajes” prevalecieran en el
tiempo de manera indefinida.
(el uso de signos labrados en
piedra mostrarían el deseo de prevalecer indefinidamente; por lo que, cuando se
realizaran grandes o descomunales edificaciones usando piedra, se buscaría su
prevalencia durante milenios y consiguientemente, dejar “un mensaje” (simbólico
o explícito) que fuera descifrable o “tan evidente” o como fuere para aquellos
quienes de ellos se sirvieren para tal tarea ciclópea - sabiendo que la
materia, tarde o temprano, con el paso de los milenios se desintegra).
Rollos, papiros, tablillas, piedras… donde se escribieron detallando
historias entendibles o por el contrario que fueran preciso escrutar e
interpretar; se guardaron o quedaron ocultas, y “accidentalmente”, se preservaron
hasta que fueran hallados, descifrados, traducidos y estudiados.
Todo ello, en nuestros tiempos “de aparente vértigo”, parecería
irrelevante e intranscendente y sin embargo, echar “un vistazo” y mirar hacia
el “origen” puede resultar, en algunos momentos, “referente orientador” pues
saber “de dónde venimos” suele resultar tan revelador que permitiría
vislumbrar, de alguna manera, “dónde nos hallamos” (y a veces, el por qué – al existir también teorías cíclicas vinculadas
con la economía o el tipo de gobierno) y consecuentemente vislumbrar o
conjeturar “hacia dónde vamos”- e incluso
“re-vitalizar” la propia existencia de nuestras vidas en razones a lo que
realmente pudiéramos considerar esencial a las mismas (por encima de los
mensajes sociales que nos llueven desde los medios de comunicación).
Y sin embargo, hasta no hace mucho tiempo – tal vez unos 20 años – se estableciera la idea de generar “capsulas
de tiempo”, al parecer llegada desde Norteamérica, y el mundo social/político
pasaría por “una fiebre” semejante generando cubículos donde meter periódicos
del día y objetos destinados a ser rescatados, tal vez, en un futuro
indeterminado. Sin duda ello fuera reflejo de esa actividad remota, donde
escritos se guardaran o aparecieran en lugares insospechados (por ejemplo grietas de cuevas ver Manuscritos
del Mar Muerto )
(de hecho, la Historia tendría/tiene también esa “misión” de “orientación” desde la visión y el estudio del pasado).
Solo a efectos de la accidentalidad
podríamos reflejar, someramente, la biografía de uno de los personajes más
influyentes en el devenir de la actualidad - actualidad que ahora vivimos - que como Humanidad parece cerrar
ciclo; pues tomar una decisión adecuada
de manera positiva “por otros” le salvara la vida,
El H.
Kissingger, tendría una formación recurrentemente “interrumpida y
accidentada” y a su vez muy transversal; iniciándose en contabilidad en la
Universidad –mientras a su vez trabaja en
una fábrica de Brochas – interrumpido por su reclutamiento, sería destinado
por el ejército a estudiar ingeniería en Lafayette
College , Pensilvania , pero el programa fue cancelado y Kissinger fue reasignado a la 84 División
de Infantería . Allí,
conoció a Fritz Kraemer ,
un compañero inmigrante de Alemania que notó la fluidez de Kissinger en alemán
y su intelecto, y dispuso que lo asignaran a la inteligencia militar .sección de la división. Kissinger, solo un soldado raso ,
fue puesto a cargo de la administración de la ciudad de Krefeld ,
debido a la falta de hablantes de alemán en el personal de inteligencia de la
división, en ocho días había establecido una administración civil. [23] Luego
fue reasignado al Cuerpo de Contrainteligencia rápidamente, por méritos propios, llegaría a
funciones de comandante siendo licenciado, recuperó sus estudios, mientras a su
vez también diera clases (no solo como
civil en el propio ejército) sus tesis de licenciatura y doctoral versarían
sobre los periodos históricos que dieran lugar a la Ilustración (y consecuentemente al nacimiento de los Valores Humanos que hicieran
posible el nacimiento de EEUU).
·
1950. El significado
de la historia: reflexiones sobre Spengler, Toynbee y Kant . Tesis
de licenciatura. Universidad de Harvard editada por
primera vez muy recientemente. La tesis explora el pensamiento de tres pensadores
distintos pero importantes en el canon del pensamiento histórico y filosófico
occidental, de manera que también refleja la propia transición de Kissinger
del mundo continental al Atlántico. (Oswald Spengler (1880–1936) fue
un historiador y filósofo alemán; Arnold Toynbee (1889–1975), historiador
y filósofo británico e Immanuel Kant (1724–1804), prusiano de la era de la
Ilustración europea y uno de los filósofos morales y políticos más importantes
de su tiempo. 1954 (publicado en 1957) Universidad de Harvard.
·
Un mundo
restaurado: Metternich, Castlereagh y los problemas de la paz, 1812–22 . Tesis
doctoral, ISBN 0-395-17229-2.
El estudio de
investigación explica la compleja cadena de Congresos que se inició tras el fin
de las Guerras Napoleónicas en 1815,
con el Congreso de Viena , y se
prolongó hasta la década de 1820. Se esperaba que el sistema le
diera a Europa paz y un nuevo orden después de las violentas
luchas del cuarto de siglo anterior. (merece
el esfuerzo ver el enlace del resumen: Un mundo restaurado: Metternich, Castlereagh y los
problemas de la paz 1812-1822
Cabría conjeturar que el desarrollo de las oportunidades que se le
presentaran a H. Kissinger tal vez no se debiera tanto a la idea de “capacidad
de adaptación” – que es un término de
rasgos más bien restrictivos, propios de actitudes “limitantes”, que
implicarían asumir restricciones personales para desarrollarse en la sociedad; esa opresión, en términos extremos, ya la
hubiera vivido en Alemania - por lo
que fuera posible que el ser aceptado en NY fuera de por sí una experiencia de
contraste e impulsadora.
La decisión esencial para que pudiera desarrollarse fue de los padres:
Salir de la Alemania Nazi de 1938; de no haber tomado esa decisión, H.
Kissinger probablemente hubiera fallecido en un campo de concentración con toda
su familia, y siendo víctima de experimentos médicos destinados al progreso y
bienestar de una Humanidad hacia un futuro paneado como perfecto.
Es decir, la decisión de sus padres de “salvar las circunstancias” – que tan adversamente se les presentaba como
familia – fue decisivo – yéndose al
otro lado del Atlántico (EEUU) – no evitaría, en este caso, que el hijo
(Henry) tuviera que enfrentarse al peligro generado por las circunstancias
propias de la época (volvería al
continente europeo) pero diera la impresión que esa “segunda oportunidad
vital” - generada por la decisión
familiar - “daría un plus” al
impulso vital, cuyos resultados aparecen como espectaculares.
Otra cuestión más diferente fuera cómo enfocaría su carrera profesional, en la que influiría cómo interpretaría la violencia que sobre él (y sus amigos) emplearían el nuevo estado alemán del años 33 (él tenía 10 años y vivió hasta los 15 años de edad en Alemania - 1938). El despido por motivos raciales de su padre y el rechazo de su propio Estado a su persona y familia. E incluso si “hubiera deseado” tener un hueco en dicho nuevo orden (sin ser excluido por razones raciales) si realmente fuera consciente de todo ello, o si su carrera fuera producto de sintetizar la historia y adaptar las mejores soluciones para obtener la paz desde un país que estaría dispuesto a ese tipo de soluciones para seguir liderando el mundo.
La
necesidad de la Ciencia como Certeza (y
aproximación a la Verdad)
En el trayecto “de comprobación” sobre el Origen,
la Ciencia desarrolla e investiga -en la
actualidad- “conjeturas” (inverosímiles/de
dimensiones inconmensurables/desbordantes con fenómenos cuasi-apocalípticos/o
apocalípticos en sí mismos, desde la perspectiva de lo cotidiano de la “gente
común”) que se impulsarían como viabilidad científica cuando Einstein “pusiera
en relación” elementos tan aparentemente cotidianos para la Física como la Masa
con la Velocidad, pero llevando a la Masa al extremo de la “Velocidad de la Luz”
transformándose esta Masa en “solo” Energía, dadno origen a la Teoría de la
Relatividad y asentando la tesis de un Big-Band inicial.
Como si Einstein, de esta manera, “hubiera iniciado”, por métodos físico-matemáticos (“sólo los números” podrían reflejar “verdad”, como aseguraban antiguos filósofos griegos), “el camino inverso” de “la creación” y “de la existencia del TODO”; pudiéndose “distorsionar” el Espacio-Tiempo - observándolo como un “tejido” - que hubiera permitido “vislumbrar y especular” – por medio de las matemáticas y las leyes físicas - con conceptos “insospechados” que existirían en el Universo (y a su vez, “contemplar” la posibilidad “matemática” de la existencia de “sus contrarios”).
El hecho sorprendente sería
que “el solo hecho” de “observar” – para
comprobar la existencia de elementos concebidos matemáticamente, que pudiéramos
considerar de tamaño “infinitesimal” - los modifique, remitiría nuevamente
“a algo” que muta por el solo hecho de ser observado (y que podríamos, en alguna medida, vincular con el relato que usamos de
partida).
Por lo que nuevamente subsistiría la idea de “algo” similar a una Voluntad/Ser (y/o no ser) preexistente y descrito como “en todo hallarse y estar, trascendental/infinito/intemporal/”sin principio ni fin” que retorna hacia una idea de “eternidad” y “en todo” hallarse).
La reflexión sobre lo que nos rodea (porque, de alguna manera, pertenecemos a
ello) lleva “a buscar” semejanzas con “lo que conocemos” (ya sea de manera
consciente o inconsciente).
También podemos
reflexionar y considerar sobre la existencia de conocimiento previo/inconsciente,
pues resulta una evidencia que los bailes o danzas que de niños nos trasladaban
en películas - por lo general Norteamericanas – sobre los indios americanos
bailando alrededor de una fogata, no pareciera otra cosa que una evocación/representación
del propio Universo inmediato (Sistema
Solar) que se percibiera de manera más o menos conscientemente por los
participantes en esas “danzas rituales”. A su vez, el hecho de que en las
películas Norteamericanas, durante esas danza hubiera participantes portando
elementos muy llamativos de animales (como
cabezas con cuernos de bisontes, o de otros astados) bailando alrededor de
la hoguera, señalaría esa idea de “vínculo” con los seres que cazaban y de los
que se alimentaban; un vínculo como de hermandad y espiritualidad,
probablemente vinculado con la idea de Consciencia común (y también Universal) como en alguna manera señalaría también S.
Francisco de Asís (con su visión del
mundo vivo como “hermanos” de los Seres Humanos procedentes de una misma
Divinidad – origen común de la existencia de todos).
La Danza y el baile no podemos concebirlo como una actividad irracional, primitiva o propia de civilizaciones incipientes. En las mismas películas Norteamericanas (de vaqueros e indios) vemos a los colonos y soldados, bailar con sus mujeres bailes europeos – como el Vals –que también se expresan bailando ordenadamente alrededor de un “centro imaginario” todos los participantes en un mismo sentido.
De alguna manera, evocamos en nuestra mente lo
que hay en el Universo por medio de símbolos que nos resultan más cercanos (aunque esos mismos símbolos se establezcan y
expresen de manera inconsciente) y en consecuencia procedemos de manera
semejante para concebir todos los fenómenos que hicieran posible la existencia
de la Vida y la Humanidad así como del Universo mismo.
La visión de la Naturaleza (Cielo, Firmamento, Horizonte, Puestas de Sol, La Luna, Planetas,
Estrellas …vegetación espontánea, incluso animales en libertad…) estimulan
e influirían en el “pensamiento in-consciente” (que puede suceder sin ser
experimentado intensamente) y que se postula a veces para explicar cómo se
resuelven los problemas difíciles en los casos en que no se empleó el
pensamiento consciente.
También se conocían
relatos culturales sobre “el origen” (de
la vida) más vinculados con las “formas y/o estructuras conocidas”, con las
que se dota “o configura” la Naturaleza para traer la vida a esta existencia y
que al parecer es, o sería, “un formato biológico” – de los muchos que se podrían concebir o imaginar – que se extrapola
al concepto de origen del Universo. Es
decir, un “formato” que se conoce “por ser propio de la biología”, se mostraría
en el Universo (Universo concebido como
inerte - materia sin vida en sí mismo – y a su vez lleno de actividad medible y
fenómenos caticlísmicos inimaginables – por sus dimensiones que escapan a la
conmensuración para el común de las personas -y que son motivo de lo que
parecieran fantasías (aproximándose a la idea de una meta-física que transcendiera
la razón cotidiana, que sería propia de vivir sobre este planeta) pero basadas
en tesis/hipótesis respaldados por cálculos científicos.
La “fecundación de un ovario” sería “un formato biológico” (reconocido y reconocible) que se pueden concebir como tesis/hipótesis sobre “fenómenos astronómicos” de referencia en el Universo, que dan origen a la vida en un Planeta concreto como la Tierra (de hecho la tesis/hipótesis fuera recordada no hace mucho tiempo), por lo que el relato de alguna cultura sobre el origen del Universo a partir de un “huevo cósmico” también sigue latente como hipótesis/tesis “a rescatar” según derive la exploración Astronómica de la Ciencia hacia una bifurcación, u otra, de las que considerara como posibles.
Se muestra con claridad que el pensamiento puede
“buscar paralelismos” que le “aporten referencias” para “comprender” el entorno
que le rodea haciéndolo, en alguna manera, previsible; y tiende a buscar
semejanzas que remiten esas conjeturas. Es probablemente por ese motivo, que las
ideas por las cuales se asocia al Universo los “modelos” para “crear/generar
vida material” tiendan a ser “modelos” que guardan similitud entre sí con la
biología.
Cuando se sostiene que el desencadenante de la vida material fuera un impacto de un gran cometa u otro hecho de relevancia o magnitud similar o incluso más “inimaginable” como pudieran ser cuando se afirmara que un impacto de un gran objeto interestelar con la Tierra - le hiciera perder una parte importante de su Masa dando origen a la Luna y a su vez ello propiciara las condiciones “idóneas” para la existencia de vida y clima “con estaciones”, tal y como la conocemos en la actualidad - se recurre a “referentes conocidos” o “semejantes” propios del ámbito de la biología.
Tanto las tesis/hipótesis que asemejan la
aparición de vida en la Tierra con la semejanza de la fecundación de un óvulo,
como otras semejantes a las que se pudiera apelar, estarían evocando las ideas
de que el micro-cosmos tuviera “conexiones” con lo concebido como macro-cosmos,
llegándose a especular con las conjeturas de que el propio cuerpo que es
soporte de nuestras existencia material sería una “representación simbólica y a
la vez materializada” de ese macro-cosmos.
En el s.XVI aún se vincularían los órganos de los mamíferos con el propio Sistema Solar o con las Constelaciones (como se aprecia en dibujos del cuerpo humano destinados a la medicina),
cuando la “era de la razón” diera lugar a la Ilustración, y desde ella
a nuestros días, y que uno de nuestros referentes, Miguel Servet, estudiaría
dibujos del cuerpo y órganos humanos las influencias específicas de cada uno de
los astros y planetas del Sistema Solar – prácticamente ya desechadas, pues si
la influencia de la Luna era constatable en el aumento de partos y
alumbramientos de nuevos seres humanos según la fase lunar, se ha verificado
también que el hecho de vivir en ciudades y desconectarse con los ciclos
Naturales, creando ambientes “controlados y más artificiales” ha llevado a
dejar de tener relevancia estadística esa influencia lunar.
(también los frutos de las
plantas, hortalizas…se vinculaban con un planeta dominante según fuera la
sección transversal que presenta cada especie, en razón de considerarse la
división interna del fruto reflejo del movimiento aparente del planeta respecto
de la Tierra).
Esas ideas que vinculan la vida material orgánica en el planeta con el propio Sistema Solar, se puede considerar “sin fundamento”, dado que tiende a prosperar la idea de “la singularidad” de cada ser vivo (vegetal/animal) y persona, en razón de su especie (concebida la especie y el individuo, como un proceso de evolución al margen de cualquier otra consideración de influencia tan específica como supusiera ser la Luna o Planetas) pero excluyendo de esta afirmación la evidencia de la influencia Solar en la vida material, por ser una evidencia cuasi irrefutable – aunque el desarrollo de la ciencia y la tecnología también tendría el objetivo de “no dependencia”, en la medida de lo posible, del considerado “Astro Rey”.
Los avances de la Ciencia y la tecnología en lo
cotidiano, parecen desvincularnos de esa tendencia a observar (por nosotros mismos y desde nuestra propia experiencia)
el Universo, como símbolo de nuestro origen y existencia (que influye en nuestro devenir); el firmamento, como fundamento que
permanente “nos recordara” una transcendencia, que parece perder relevancia.
Sin embargo, en la película “2001 Odisea en el
Espacio” “se vuelve a evocar” una imagen explícitamente “disruptiva” con lo
cotidiano, como para hacernos evocar, o recordar, la posibilidad de seguir
explorando “lo transcendente”, en sus imágenes finales.
Resultaría muy fácil conjeturar una
similitud/paralelismo que se establece con la vida estable en nuestro Planeta
configurando, a su vez, una atmósfera cuasi como “membrana celular” que
“filtra” todo lo que de agresivo/nocivo pudiera llegar o influyera del espacio
que nos rodea, dejando pasar solo lo que fuera “preciso y necesario” para
seguir manteniendo la existencia de vida.
La simbología/analogía que presentan estos relatos precisaría de una
abstracción que tiende a ser impropia del método científico, y más propias de
una sensibilidad vinculada con la imaginación y/o la creatividad. El ámbito Norteamericano de la enseñanza,
seguiría contemplando, al menos hasta no hace mucho (así lo mostrarían algunas
películas), las interpretaciones simbólicas en las “construcciones” donde se
expresa el ser humano, fuere literaria o artística (sometiéndolas a opinión de
los alumnos sobre “qué les sugiriera” una frase, un poema, un libro, una
pintura o cualquier otra expresión artística) haciendo posible la exploración
de un contenido simbólico subyacente en una obra artística, a excepción de las
Sagradas Escrituras, que suelen ser tomadas con literalidad en muchos ámbitos
de sociedades y no tanto por Europa).
Siendo el criterio científico un sistema de verificación uniformado basado
en lo que se muestra como “una literalidad” ha resultado en un lenguaje de
comunicación dominante que pareciera excluir el pensamiento o las referencias
simbólicas. Por lo que es probable que
un lector, desconozca que el mundo científico se seguiría alimentando de
“relatos culturales” para “ampliar” su visión científica – mucho más allá de lo que pudiera concebir el propio lector a propósito
de cómo se concibe la Ciencia: Químicos y/o bioquímicos que trabajaran para las
industrias (en especial farmacéuticas) se adentraran en selvas guiados de
“brujos/as y hechiceros/as” de tribus aún ancladas cuasi en la “Edad de
Piedra”, en busca de las plantas que empleaban para curar enfermedades y
padecimientos, (bajo el criterio del hechicero/a que tuviera un criterio de
“semejanza” en la forma de una planta y el órgano afectado de un mal; y que
debiera ser motivo al menos de reflexión, pues en ocasiones, pareciera que la
naturaleza, a veces, traslada “sus mensajes” explícitamente al propio “Ser
Humano” (aunque por prudencia no deba de considerarse como regla, pues en la
Naturaleza también existe “el engaño”: La perdiz “se hace la coja” para llamar
la atención del cazador y alejarle del nido; a su vez, una planta carnívora
“atrae” insectos y los aprisiona; o la araña teje una tela que puede resultar
poco visible para capturar “comida” – aún así, la “forma” como reflejo de un
órgano, empleada como medio para un remedio no dejaría de sorprender).
Por mucho que “se mostrara” la Ciencia “alejándose” de estos relatos
culturales propios de culturas “cuasi-arcaicas” (reservando o encasillando su estudio para el ámbitos relacionados con
la Antropología) se suele ver en la necesidad de recuperar “conceptos” de
esos relatos - retomando lo que pareciera
“un criterio preexistente” que rigiera los fenómenos que se vinculan con el
origen de la vida y su existencia - a pesar de la idea transmitida de haberlos
superado “desvinculándose plenamente” de tales relatos (que fueron tomados, en inicios, como mitos o figuraciones propias de la
ignorancia y/o la superstición) pero que a la postre analizados y
estudiados desde diferentes perspectivas
– incluida la Histórica vinculada como referencia – a verificar o no - con la
Arqueología, la Geografía o la Geología - parecen poseer información – y tal vez conocimientos - a veces mucho “más
explícitos y/o literales” de lo cupiera concebirse en una primera aproximación.
La vinculación de estos relatos culturales – entre sí, a pesar de las distancias - poseen “un reflejo o descripción” de los orígenes, probablemente más certero de lo esperado (dado los aparentes pocos recursos técnicos que poseyeran esas culturas), por lo que suelen ser retomados después de que “algunos pioneros” (primeros y mediados del siglo XX) señalaran que esas explicaciones fueran aceptables – en contra del criterio científico dominante del momento – por lo que esperar 30 o 40 años para ser retomados, explorados, estudiados y divulgados por el mundo científico, ya dotados de criterio y lenguaje preciso, resultaría un lapsus de tiempo necesario (para exploración científica con que nuevos profesionales se acercan con visiones más abiertas, que retomaron esos relatos antes desechados por personalidades influyentes).
La Sociedad concebida
como Masa
El Pueblo fue definido como Tercer Estado o
Estamento en la Edad Media, propio del Feudalismo y el Antiguo Régimen.
Así lo enseñaban en clase, aunque probablemente,
como a la mayoría de los alumnos que recibían en el Bachillerato Elemental esa
“información” la responderían de memoria en el examen, pues definir Estado para
alumnos de esas edades resultaría complejo como lo sigue siendo en la actualidad
para el común de la Ciudadanía.
A veces se suele intentar definir Estado por medio de una aproximación a la actividad que desarrolla, vinculadas al
término “razones”, que a su vez remiten a la idea de Poder expresado en Fuerza,
que a su vez deriva de esas mismas/pretendidas “razones” (razones que serían “intereses propios” de Estado); en este caso del
Feudalismo y Antiguo Régimen se referiría a los intereses de quienes componen
esos dos otros Estados que se expresaba en
forma piramidal, siendo la misma cúspide (“piramidón”, pétreo o de oro que se situaba en lo alto de los
obeliscos o pirámides, como punto de unión entre el Cielo y la Tierra),
consecuentemente seguido del Clero, la Nobleza y el Pueblo Llano.
El Pueblo Llano, llamado a veces “Plebe” – emulando la división de la Sociedad Romana
entre Patricios y Plebeyos – o “Comunes”- término que perduraría por
ejemplo en Gran Bretaña cuando se habla de las dos cámaras, la de los “Lores” y
la de los “Comunes”.
Existe demostración que en el periodo 1023 a 1025
(s. XI y XII) apareciera el primer teórico (Gerardo
de Forennes) que justificó la división de poderes en tres Estados del Reino. La sociedad Humana
constaba de tres órdenes: Los que rezan, los que luchan y los que trabajan. Los
que luchan eran el rasgo de los políticamente poderosos, ambiciosos y
peligrosos. Los reyes se asegurarían que no resistieran su autoridad. Los que
trabajaban (que no eran guerreros o
Nobles) se diversificarían desde el S: XI en campesinado, artesanos
cualificados, comerciantes, financieros, profesionales laicos y empresarios que
impulsan la economía europea a sus mayores logros.
Aunque existe consideración de llamar Masa a la
sociedad que toma Consciencia de los privilegios de los estamentos que tienen
por encima (Clero, Nobleza…) para
influir sobre ellos generando un Cambio Social, situando ese concepto durante
la Revolución Francesa, en alguna manera, aún así, al propósito de la reflexión
de este artículo, parecería más apropiado considerar que desde “la debilidad”
de la condición de ser Pueblo (penurias,
escasez, dificultades…) solo fuera la Unión en momentos puntuales de la
Historia (unión promovida por otros que
siendo de condición de “Pueblo”, “Comunes”… adquieren tareas específicas
(profesionales independientes, comerciantes, financieros…) que les
otorgaría capacidad financiera y consciencia/conciencia de aportar tanto o más
a la sociedad que los Estados que tiene por encima y que considera “no
productivos” y a la vez imponen impuestos, dificultades, restricciones y obstáculos
(como así se percibiera a la Nobleza y el
Clero), por lo que la Revolución se hallaría en participar de las
decisiones configurando una Cámara de Representantes (elegidos por sufragio) para debatir las decisiones económicas y
sociales que hicieran posible mejorar las condiciones de vida del Pueblo.
Es ahí donde se concibe que el Pueblo/Ciudadanía posea recursos propios y es ahí también cuando el resto de los Estados en que se compone la sociedad toman conciencia de “la amenaza” que supondría “alentar” al Pueblo o la ciudadanía en tomar conciencia de las desigualdades en razón de la condición social o falta de oportunidades. Sería a partir de ahí donde la Ciudadanía adquiere su doble cualidad de Masa; por un lado (de manera pasiva) es capaz de ser “moldeada” (como masa de pan) y por otro lado (motivada por una fuerza exterior) es/era capaz de infundir temor y trastocar el Orden Social. El Pueblo, la Ciudadanía, poseía como Masa (fuerza específica) capaz de transformar el entorno social (como ocurre en la Revolución Francesa), y a su vez es maleable y deformable.
Durante una etapa que se podría considerar de
“compromiso social” con el devenir, los ciudadanos se organizan y participan de
las actividades como “Sociedad Pública” impulsando al Estado en una determinada
dirección donde presta Servicios (ya,
aparentemente concebido como “maquinaria” de administración). El sociólogo C. Wright Mills señala:
1. prácticamente tantas personas expresan opiniones como las reciben,
2. Las comunicaciones públicas
están organizadas de tal manera que existe la posibilidad de responder de
manera inmediata y efectiva a cualquier opinión expresada en público.
3. La opinión formada por tal
discusión encuentra fácilmente una salida en la acción efectiva, incluso
contra, si es necesario, el sistema de autoridad prevaleciente.
4. Y las instituciones autorizadas no penetran en el público, que es así más o menos autónomo en sus operaciones.
(en contraposición
a situaciones pasadas donde la actividad civil y el compromiso social era más
posible) El sociólogo C. Wright Mills explicita una
situación más reciente que asemeja nuevamente a las características de masa:
1. mucha menos gente expresa opiniones que las que las reciben; pues la
comunidad de público se convierte en
una colección abstracta de individuos que reciben impresiones de los medios de
comunicación de masas.
2.Las comunicaciones que prevalecen están organizadas de tal manera que es
difícil o imposible que el individuo responda inmediatamente o con algún efecto.
3.La realización de la opinión en
acción está controlada por autoridades que organizan y controlan los canales de
tal acción.
4. La masa no tiene autonomía de las instituciones; por el contrario, los agentes de las instituciones autorizadas penetran en esta masa, reduciendo cualquier autonomía que pueda tener en la formación de opinión por medio de la discusión". [7]
Se podría considerar que los poderes reales
poseen ya todos los recursos y capacidades para guiar a la ciudadanía al lugar
dónde se deseara, sin esta poder concebir con claridad a donde es llevada, por
el contrario supone que ella elige donde va según la información que recibe de
las circunstancias.
El Pueblo, la ciudadanía parece seguir
observándose como el mayor problema de los Estados, pues es preciso y se
precisa y a la vez son fuente potencial de conflictos de gestión, en especial
de los recursos disponibles (incluso en
ocasiones parece que es percibido/a como “un recurso natural” más, a
disposición de una minoría/élite que determinaría, paso a paso, el destino de
la Humanidad). Como si entráramos en una etapa conocida propio del
Despotismo Ilustrado, pero dirigido por argumentos tecnológicos de gestión
social, considerados irrebatibles en las circunstancias actuales.
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“Convenir” que existimos, en el sentido de “poseer
vida y consciencia” (tal y como se
concibe en la actualidad) formaría parte de “un axioma” que, como tal, “no
precisa” más explicación, o demostración, que la “evidencia” en sí misma.
(En alguna manera, ese “convenio de existir” tendría una analogía, al
“convenio” que existen sobre los números; sobre todo, cuando nos referimos “a la
evidencia” de los números Naturales – (en base 10)– que usamos cotidianamente;
aunque en realidad fueran/son “símbolos” – (símbolos que se consideran
inventados por sacerdotes hindúes) - cuya utilidad diaria, para cuantificar
conjuntos de la misma naturaleza, obviaría cualquier aproximación hacia una
definición que explicara o definiera su existencia en la Naturaleza que nos
rodea. Siendo cotidianamente útiles, “se toman por ciertos”, ya que “hemos
construido” “todo lo que nos rodea” desde el uso de los números y nuestro
devenir como sociedad e individuos dependen de ellos).
Se da por implícito que existimos como personas (en su cualidad de poseer vida y consciencia de existir) pero como definición en sí misma, “no se la puede definir, ni demostrar…” apelamos a deducir nuestra existencia por medio de la “evidencia” de “un estado contrario” (dejar de existir, en su cualidad de no poseer vida y consciencia de existir).
No suele ser parte de una reflexión compartida y
profunda sobre ello, se da por cierto y obvio; se podría vincular con lo que
podríamos considerar “paradigmas” y “axiomas”
“que convenimos” para integrarnos con rapidez y agilidad al mundo social y a
nuestra sociedad, recibiendo una instrucción/formación para “determinarnos” a
adquirir un rol/papel social, por el cual obtendremos una remuneración, con la
cual “construiremos nuestras vida y existencia” siguiendo, por lo general, el
mismo trayecto de la inmensa mayoría de seres humanos (desde los planos biológicos y sociales).
Siendo así, que muchas de
las preguntas esenciales sobre nuestra existencia (¿qué es?, o ¿cómo es posible? o
cuestiones de semejante transcendencia) serán aplazadas, o abordadas, en
situaciones o momentos singulares; tal vez de manera general y superficial (porque de alguna manera producen/producirían
“un vértigo”, en alguna manera, enojoso o desagradable; consecuentemente
difícilmente abordable en el ámbito social, por lo que quedaría adscrito al
ámbito de “lo personal e íntimo”); otras
veces se afronta, simplemente, de manera instintiva o irracional (como tener sexo después de asistir a un
entierro – considerando ello “normal” porque muchos así actúan, al constatar la
finitud de la existencia, como señalaría explícitamente la película “El Pequeño
Buda”, cuando los padres del niño, argumentalmente “reencarnado”, asisten a un
entierro y comentan entre ellos esta circunstancia concreta, señalándola como
reacción común entre las personas). Se asumen respuestas y alternativas para
“lo trascendente” que son comunes y consabidas, aceptándolas como una opción “al
alza”, sin reflexión, y simplemente no se consideraría cuestión a resolver,
necesaria para vivir en sociedad.
Con la singularidad, como casi definición de la
propia existencia humana, se tiende a olvidar o ignorar que el ordenamiento de
nuestras sociedades (jerarquías en la
sociedad) desde la antigüedad evocarían, a su vez, una proyección simbólica
de lo que vieran en el mismo Cielo tomándose como referencia al propio
Universo; y que esa referencia – sea
aparente o real, lo que en el Cielo se ve y percibe – sí afecta, de alguna
manera sustancial, a nuestro devenir; como así parece suceder cuando se vive en
“lo urbano”, perdiendo las referencias del Cielo y su visión, así como el
aislamiento de las personas respecto del contemplar cotidianamente la
Naturaleza, hacen “de facto” perder referencias que marcaban nuestros ritmos
vitales y nuestra percepción “de vínculo y pertenencia” con un Universo
(explicitado en el Cielo), en favor de los “ámbitos urbanos controlados” y
artificiales, donde esas referencias casi no se perciben y por lo cual pierden
su influencia cotidiana (y positiva) sobre nuestra consciencia y mente.
No sería preciso recordar/evocar los
conflictos acaecidos con motivo de la Revolución Copernicana (que afectaría a directamente a Galileo y a
sus contemporáneos y posteriores, (Descartes o Newton o Kepler…) que hacía
que la Tierra girara también alrededor del Sol (influyendo esta tesis/hipótesis en el paradigma de reflejar el Orden
Universal como el mejor gobierno a emular sobre la Tierra, por lo que,
probablemente, con ese paso se “diera lugar” a poner las bases de para los
gobiernos Republicanos, (siendo las consecuencias primeras, la Independencia de
EEUU y la Revolución Francesa).
Bastaría, por ejemplo, para percibir esa
influencia en nuestra mente y pensamiento, expresar una de las tesis del
“devenir del Universo”:
El Sistema
Solar - que como tal se consideraría una especie de
Unidad Básica respecto a la configuración del Universo tal y como se concibiera
– viaja con el Sol que a su vez, parece “protegerlo” con “su amparo
electromagnético” de la adversa actividad interestelar. Unidad Básica dentro de
una Galaxia cuyo contenido gira en torno a lo que parece ser un enorme “Agujero
Negro” que “tragaría” desintegrando toda materia transformándola en
supuestamente “solo energía” y, a su vez, especulando si esa energía fuera transportada a otro
lugar/tiempo/espacio donde tal vez volver a iniciar un ciclo de existencia
indefinida o indefinible. De alguna manera, al concebirnos dependientes del
Planeta, y este dependiente del Sistema Solar, y a su vez de nuestra Galaxia
“Vía Láctea” que parece contener un Agujero Negro en torno al cual giramos
hasta “un día indefinido”, o indefinible, “precipitados” a ese horizonte que
todo lo parece convertir en energía…
Aunque ese día fuere remoto o
intranscendente para nuestra existencia concreta (y la de nuestros seres queridos), de alguna manera se tomaría la
propia tesis/hipótesis de este devenir, como “síntesis” de “referencia” o
“ciclo universal” de la existencia de “la materia” y “siendo la materia”
soporte de nuestra existencia material (biológica)
tenderíamos a extrapolar como “destino Universal” que “a todo” lo que existiera
aconteciera.
Desde esa perspectiva podríamos convenir
que los acontecimientos y fenómenos que pudieran considerarse como
hipótesis/tesis posibles, o certeras, del devenir del Universo sin duda
afectarían al pensamiento de las personas – y
aún más si estas se fundaran desde una perspectiva estrictamente materialista
(como suele ser tendencia en la actualidad) – y siendo que los pensamientos
son los que acaban decidiendo nuestra conducta cotidiana, podría concebirse que
las tesis sobre el devenir de la materia (como
consecuencia de lo observado en el Universo) sí podrían influir en nuestra
percepción de nuestra propia existencia.
(por
lo que el relato “que habla”
respondiendo a las preguntas Aristotélicas: ¿Dónde estamos? ¿Qué es lo que nos rodea?
“¿Cómo o porqué existe todo esto? ¿Qué hiciera posible el “Todo”? son
respuestas que acaban siendo relevantes para el devenir de cada persona y
consecuentemente de la propia sociedad).
De alguna manera, no resultaría lo mismo responder
a estas preguntas existenciales desde un ámbito inserto en un medio Natural – donde diariamente tendríamos la opción,
sobrevenida, de observar la magnitud y profundidad de Universo que nos
contiene, y con el contexto de Naturaleza al que ha dado origen ese mismo
Universo, o incluso poder observar el horizonte, - y nuestra propia
conciencia “se activaría inconscientemente” dándonos respuestas más
transcendentes y singulares.
(“estimulados”
por la observación y experiencia de observar el firmamento y por ello
“destinadas a nosotros mismos” – y si establecemos esa idea paralela por la
cual al observar algo infinitesimal modificamos su conducta, cabría “concebir”
que lo que fuera que fuese que nos observara desde el Firmamento – aunque fuera
un reflejo de nosotros mismos, es decir, nosotros al mirar el firmamento nos
viéramos a nosotros mismos – nos modificaría directamente, nuestra propia
mirada al Universo/Firmamento – otorgándonos seguridad, estabilidad y momentos
de confianza)
Estar más aislados de ese contexto Natural, sin
poder apreciar el propio Universo y apenas tener pequeñas “muestras” de la
naturaleza, vos vemos en la necesidad/obligación de tener que aceptar como
“única verdad” para nosotros, las pretendidas experiencias de otros – o simples afirmaciones o aseveraciones que
se apoyan en experiencias científicas de terceros, pero que en casi todas las
ocasiones desconocen como tal experiencia aquellos que las muestran como verdad
- y a las que solo tendríamos opción de aceptar por “fe” (“fe” que tendríamos que reflejar en un examen
del que dependerá nuestro futuro en sociedad); siendo así, una condición
que cualquier científico debiera rechazar de por sí, porque fuera contra los
mismos principios sobre los que se asentara la misma Ciencia: Dudar/Comprobar/Verificar
como proceso de experiencia personal.
La mente y el pensamiento quedan muy
limitados, sin poder acceder “a esos estímulos” que nuestra mente hubiera
siempre recibido/percibido - desde nuestros ancestros - para
constituirse como tal “mente”, (a los que apenas puede regresar en su
plenitud cotidiana, más allá de momentos vacacionales que
precisan de recursos económicos), pues el medio “artificial y controlado”
que venimos creando en los medios urbanos se presenta como una alternativa casi
única, y a su vez positiva y de desarrollo en todos los planos.
Consecuentemente, el pensamiento y nuestra mente - que nos lleva a “comprender” la transcendencia de lo que nos rodea y contiene “haciéndonos parte de ello”, de manera muy singular, y que por su naturaleza, podría considerarse, en alguna forma, que transciende la racionalidad hasta completarla, dando un profundo sentido existencial a nuestra propia existencia y relativizando lo cotidiano para conectar con lo que fuera un “yo profundo” difícil de definir – tendería a considerar que “lo transcendente” (¿?) fuera la urbe y lo que en ella se hallare, perdiendo la posibilidad de tener la experiencia de pertenecer al Universo y al “misterio” que “lo hiciera posible” y al misterio de la vida y la existencia, sustituyendo esos misterios por las sugerencias “científicas” (con sus tesis/hipótesis) de lo que pudiera ser que fuera y “conformarnos con ello” (so pena de padecer un nivel de exclusión social consecuente y a veces desproporcionado)…
Reflexionar sobre lo que nos rodea y exponerlo al
entorno tiende a ser una actividad de cierto riesgo. Lo común es aceptar el
entorno social, tal y como nos llega, y adherirse/acomodarse a él según las
modas que toquen vivir.
Cuando Descartes fuera
“acosado y acorralado” por sus trabajos - que
llevarían a poner las bases de la era de la razón y el desarrollo del método
científico - se usaría por sus
adversarios “los propios principios” que Descartes” usara para “convenir” que se podía “convenir” un
método para llegar a evidencias consensuadas que darían lugar a verdades
científicas: “dudar”, “cuestionar” y encontrar “verdades” para desde ahí “abrir
la mente”. Sus adversarios parece que usarían del modelo (de interrogación) “socrático”, para
a su vez, “dudar”, “cuestionar” y desde ahí “convenir” “cerrarle la mente” a
Sócrates y con ello “a toda su obra”. Viéndose, Descartes, en la necesidad de “salvar toda su obra” y encontrando,
en “ese asedio” al que era sometido bajo sus propios postulados, un “último reducto” (a modo de “la última
fortaleza”) que a su vez fuera el principio y piedra básica desde la cual
edificara su obra y se constituyeran sus trabajos (y mediante el cual podrían ser verificados, re-construidos y/o ampliado
por otros/cualesquiera que podrían, así
mismo, construir sus propios trabajos para “descubrir” otros aspectos del
“mundo que nos rodeaba”, o poder ser constatados sus logros o hallazgos por
otros cualquiera, verificando, así, las certezas convertidas en “verdades” y
despejando el camino a lo que llamaríamos Ciencia.
El “último reducto”, “la
última fortaleza” donde Descartes se hiciera “fuerte” fuera con la frase:
“Pienso, luego existo” (que fuera
traducida al latín: “Cogito, ergo sum”) y que, en alguna manera, evoca
aquella otra – de apariencia también
“defensiva”- pronunciada por Sócrates: “Solo sé que no sé nada” (por la que también, en el hecho de pensar
muestra su propia existencia) y siendo Sócrates también “asediado” hasta
tal punto de hacerle elegir entre su existencia (seguir viviendo) o su obra (sus principios) – eligiendo “sus principios antes que su vida”.
Si se tratara es de
mantener “un orden inmutable” (por considerarse
socialmente conveniente) no se
repararía en usar cualquier método (argumento)
para ello, con independencia de que en origen esos métodos fueran considerados
“socialmente peligrosos” (como lo fuera
el de Sócrates o el de Descartes), si el fin, por el contrario, es
“conservar la sociedad en un orden conocido y previsible”.
En estos tiempos
observamos una “dependencia de la sociedad”, de tal naturaleza, que apenas
existiría alternativa a la misma – como
si la Ciencia ya lo supiera todo de lo que es una sociedad y los individuos que
la componen - considerando que hubiera llegado el momento de “guiarla” para
siempre (incluso férreamente) en lo
que pudiera concebirse como una especie de Despotismo Ilustrado – todo para el pueblo, por el pueblo, pero sin
el pueblo/aunque pareciera lo contrario - que no fuera ejercido ya por monarca alguno sino directamente por el
mundo de la Ciencia en cada una de sus especialidades - que así señalaría
que sabiendo todo de todo lo que representa ser persona Humana y sociedad
Humana, no precisaría ser completada, sino constantemente recopilada (como si hubiéramos vuelto a la diferencia de
opiniones entre el Franciscano (que raya la herejía) y el Benedictino (que
llega al asesinato para mantener lo conocido y ya establecido) que explicitaría
Humberto Ecco en su libro “El Nombre de la Rosa”).
Concebir que fuera objetivo concreto, hacernos
socialmente mucho más dependientes “de lo que otros percibieran” - ya fuera desde el mundo científico y/o con
los medios de comunicación social – encarrilados en lo socialmente correcto
y aceptado, sin alternativa ni capacidad de ella; requeriría, a su vez, limitar
los estímulos que llegarían de la propia Naturaleza - pues son los estímulos que recibos de nuestro propio entorno los que “de
facto” abre posibilidades para cada persona, y con ellos, a nuestra mente,
nuestros pensamientos y nuestra capacidad de creatividad. De ser así, se estaría prosiguiendo “la senda
de la limitación”, desde nuevas
perspectivas, siendo nuevamente solo posible “elegir entre lo que se ofrece” y
no entre lo que fuera posible elegir, habiendo estando al alcance la elección.
sin duda, la muestra más evidente en esta ciudad de Zaragoza es el hecho de haberse permitido tapar las vistas del Moncayo desde los puentes de la ciudad sobre el Ebro – distante a 90 kms y que se viera desde los puentes de la ciudad, desde donde se percibiera la nieve en invierno – tapado por una construcción que parece formar parte de una línea de construcciones – que pareciera planeada – que con el tiempo se mostrarían, de seguir esa estrategia de aislamiento de la ciudadanía, como una verdadera y real muralla de edificios de gran altura, destinados a presentarse como tal, que priva ya no solo de ver el símbolo de esta tierra sino todo posible atisbo de horizonte y con el tiempo cualquier expectativa de ver una sencilla y universal puesta de Sol (no deja de ser una limitación, que podría considerarse de gravedad ya que evita percibirnos como parte de algo mucho más transcendente que una cotidianidad diaria “siempre artificial” e “incluso mono-tema” e interesada, a la que parece se quisiera convertir como única realidad vital para todo ciudadano).
Antagonismo: La Realidad
y la Verdad
El político es el intermediario entre una realidad
“compleja y difícil” (que podría dar
pasmo y miedo a la sociedad) y la propia sociedad. Su papel es transmitir
confianza, resolver o sortear dificultades cotidianas, hacer gestionar o
gestionar los recursos de la sociedad, prometer o hacer concebir un trayecto
posible hacia una sociedad mejor y convencer a la sociedad de que se halla
avanzando hacia una meta que acerca al paraíso en la tierra – o que es capaz de
remover los obstáculos que obstaculizan ese trayecto.
Ante
el caso del conflicto de los Controladores Aéreos de 2010, en España, (conflicto
similar al enfrentado por Ronald Reagan en 1981 que despediría a todos los
controladores aéreos) la SEXTA emitiría en repetidas ocasiones
estos sucesos en un programa de investigación de su parrilla televisiva.
En
la misma aparecerían unas declaraciones de
uno de los Jueces (de la veintena) que llevaran este caso, pues fue cuestión que afectara a todo el
territorio español, y siendo la estructura judicial territorial, intervinieron
muchos Jueces. Las declaraciones públicas al respecto de esta huelga
convencieron a la opinión pública de que los “malos de la película” eran los
controladores aéreos (incluso el Juez que
le tocara llevar a alguno de los encausaos, antes de entrar en la causa y leer
los expedientes, así lo concebía también).
La
conclusión que se extrae según la declaración de los participantes en ese
programa (a tenor de lo dicho por el economista Becerra) fuera que la directriz
general en Europa fuera privatizar todas las compañías propiedad de los Estados
con la finalidad de que la libre competencia propia del libre mercado fuera
establecida en la UE. Siendo AENA una compañía rentable se dispondría a la
venta, poniéndose al parecer objeciones por los salarios de los controladores
aéreos; por lo que la estrategia fuera llevarlos a una situación /condición sin
salida posible y posteriormente llevarles a la una pretendida Huelga (que no
existió) y forzar la intervención del Ejército (como hiciera Reagan en EEUU) y luego
judicializar la causa.
Las
declaraciones de este juez señalarían que al leer el contenido de la causa y
los documentos y pruebas, quedaba claro que los controladores aéreos no
tuvieran culpa alguna, pues desde enero de ese año se fue modificando la
normativa de tal manera que no pudieran hacer horas y al finalizar el año –
justo en vacaciones – tuvieran problemas para seguir trabajando dentro de la
legalidad que hubiera constituido el propio gobierno.
A
pesar de la evidencia, la Administración siguió acosando e intentando acorralar
por todos los medios a los controladores aéreos judicialmente, aunque los
recursos y acusaciones no prosperaran.
El Juez diría que la Realidad no se ajustaba a la Verdad Social (verdad que impusieran los medios de comunicación en razón del criterio de aquél Gobierno). A entidad fue vendida y privatizada y según el economista el Estado pudiera haber obtenido mayores beneficios si no la hubiera vendido y hubiera alzado el precio de venta a la vista de los resultados de la empresa después de la venta.
Existe
pues una Realidad y una Verdad, que siempre, por algún motivo o causa, aparece
y que se ha de gestionar.
Por ejemplo,
la realidad del País Vasco no es la realidad del resto de España, por la naturaleza del conflicto establecido en
aquél territorio a causa de fomentarse la violencia armada. La realidad que
percibe aún gran parte de la población (y
del relato que lo evocara para no olvidar) lleva al voto a una entidad
política concreta que actúa dentro de la legalidad, pero que por motivo de
luchas políticas por el poder, se le piden más restricciones para así golpear
al actual Gobierno (que no esperaba tal
movimiento argumental en la oposición en periodo electoral).
En sí
misma la violencia nunca debiera ser fórmula, pues como decía Franco Batiato:” Detrás
de toda violencia el mal existe” y el conglomerado de intereses y presiones
internacionales ha demostrado que usa de esos grupos para generar mayores
conflictos a u país y que este ceda a presiones que no le interesan o
perjudican (e incluso malas actuaciones
internas, como señalarían las imágenes en la plaza de Toros de pamplona entorno
a 1976 ó 76, donde un grupo de fuerzas del estado entrada en la plaza pistola
en mano y disparando a la gente - las
imágenes dijeron hace unos años que desaparecieron de los archivos de TVE).
Esa
realidad nunca podrá “casar” con el resto del país, por lo cual existen “dos
Verdades” irreconciliables por el momento y que son origen de nuevas propuestas
destinadas a limitar actividades políticas de formaciones que se hallaran en
similares situaciones al defender a su vez posiciones independentistas. Lo que
abriría la puerta a la ilegalización de otros partidos semejantes o similares (cuestión que ya se planteara) pudiéndose
generar un nuevo conflicto social de magnitud imprevisible que difícilmente
podríamos evaluar en consecuencias – pues se podría llegar al Estado
Autoritario indefinido, con la aceptación de algunos partidos políticos
relevantes.
El problema
que se establece entre Realidad y Verdad se remonta a siglos (como vemos en Descartes,
Newton, Galileo…)
Existe
un artículo (en este blog: El
desconocido s.XIX en España y las distintas interpretaciones de "la
Luz" que llegaron con Copérnico y Galileo.) referido a la
importancia sobre la “referencia celeste” en el ordenamiento jerárquico de la
Sociedad y la importancia que ello poseía como referencia más allá de la
“literalidad” del movimiento real de los planetas (como reflejo del orden
divino universal).
Esos descubrimientos sobre la literalidad Real y explicación del movimiento las orbitas planetarias, frente a la Apariencia sostenida como Verdad, levaría a la actividad de “negar” la evidencia de ser el planeta Tierra esférico y se impulsaría y reforzaría la idea de ser la Tierra plana, llevando a filósofos/matemáticos como Newton a definir otros conceptos como “gravedad” para ratificar la esfericidad de la Tierra (pero se generaría así, una especie de ignorancia útil que limitaría la aceptación de cualquier avance que pusiera en entre dicho el Orden Universal aparente, constituyéndose/ o visualizándose, así, la vulnerabilidad del Pueblo, que luego se llamaría Ciudadanía.
EPILOGO
El artículo tal vez lleve a considerar que
lo que tenemos en común es muy relevante y todos mereceríamos esa consideración,
más desde la visión humana que decimos sostener.
La información “transmutada en
conocimiento y sabiduría” tiende a dar satisfacción por el bien, hasta el punto
que tiende a la generosidad de ser compartida, como lo es todo acto del que se
vislumbra felicidad. De ahí que exista el término “Amor al Conocimiento o a la
Verdad” y que el término se conozca como “Filosofía”.
El resto de este devenir, es cosa de algún lector que así por bien lo considerara.
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