- Nosotros pecamos, pero ocultando nuestros pecados pasamos por honestos y juiciosos; quien los revele merece castigo.
- Nosotros no ocultamos nuestros pecados, en nuestra ingenuidad, son públicos y entre lenguas andamos; por si tenemos pocos aún nos hechan más encima, los de los otros, y con todo ello vivimos.
Vino el "Cristos" y redimió a los segundos y al Cielo los elevó.
Y los primeros quedaron gobernando la Tierra desde su "perfección".
Quien podrá salvarse de este mundo de apariencias:
- Nosotros no ocultamos nuestros pecados, en nuestra ingenuidad, son públicos y entre lenguas andamos; por si tenemos pocos aún nos hechan más encima, los de los otros, y con todo ello vivimos.
Vino el "Cristos" y redimió a los segundos y al Cielo los elevó.
Y los primeros quedaron gobernando la Tierra desde su "perfección".
Quien podrá salvarse de este mundo de apariencias:
La Ley del Cielo es quitar al que tiene para darle al que no tiene.
La Ley de la Tierra es quitar al que no tiene para darle al que le sobra.
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