Miguel Ángel Ibáñez Gómez - maiges_ps@hotmail.com

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viernes, 15 de noviembre de 2019

(I) Nueva fase de ataque del entorno familiar hacia mi persona.

Me he decidido, ante la situación que parecen querer generar mis hermanos a tenor de lo  publicado en "Cuando elobjetivo es tener divididas a las familias" y en el posterior (II) "Cosas de mentes sanas" y a tenor de: "Los arreglos en la Administración de mi ciudad" y "Gloria Labarta, Calumnias, Injurias y otras mentiras". Debido a que la estrategia, pues siempre funcionan de la misma manera, pasa por mentir a los amigos de la infancia, con los cuales tenemos un wasap, he decidido, al primer síntoma que ya se ha producido por parte de mi hermano mayor, en el cual pretende generar una nueva idea contra mi integridad moral y psicológioca, entrar en escena mediante los siguientes mensajes, el primero ya ha sido leído por todo el grupo de "Parcela....", el segundo parece necesario que terminen la jornada laboral para que terminen de leerlo (todos los textos son extractos de artículos ya publicados en mi blog):


Primer wasap de justificación de defensa:
Como mi hermano Mayor me llamó ayer, por la noche sobre las 22 h y colgó rápidamente, y luego su actual esposa me wasapeo para algo del tango del día 7 de marzo (para pedirme un teléfono que ya conoce y sabe) sospeché que mi hermano prosigue por la línea de mantener una imagen adversa de mi persona ante vosotros y ante cualquiera, por ese motivo y para despejar dudas os digo que en principio no iba a ir, pero si puedo iré, dependiendo de la situación de mi hijo que os paso a exponer y que creo que no conocéis. 
He estado viendo la quedada del próximo .......en el Oríges (cerca de El......), y me pensaba mucho en si podría ir  o no porque existe un problema familiar muy grave y veo que mi hermano no dice nada al respecto. Mi hijo mayor ha recibido malos tratos desde que era niño y ahora está pagando las consecuencias. Puse denuncia en el juzgado cuando me di cuenta hace 25 años pero mi ex alegó con un papel que yo estaba loco y el juez no hizo lo que tenía que hacer: Que los servicios del Juzgado visionaran a mis hijos. La bronca que tuve por ello con el juez, pues le saqué de su espacio de confort – su despacho – fue monumental y se enteró todo el juzgado, incluso me amenazó con llevarme a la cárcel. Mi abogada me contestó: Trabaja mucho y da mucho dinero en casa; ahora ninguna de esa gente asume las consecuencias de no haber atajado esta situación de mi hijo (pero el dinero lo siguen cobrando puntualmente, aunque no cumplan debidamente con su trabajo).
Intento ayudarle desde hace cinco años, desde que retomó él contacto conmigo (y sus hermanos también, aunque ellos cedieron a las presiones maternas, aunque también sufrieron de ello lo mismo que su hermano mayor – la fuerza de la imagen materna siempre será más poderosa que la del padre, cuando expone sus razones). Y el mayor ha sufrido un acoso, por parte de la familia materna que se está exponiendo en el terreno de abogados, con la finalidad de estructurar una línea de acción jurídica que desvele lo padecido por él durante los últimos 25 años (junto con sus hermanos, pero estos, al estar siempre juntos, los gemelos, pudieron ir superándolo poco a poco y su madre les ha dado un piso a uno y a otro el dinero para comprar un local donde es encargado; al mayor, por estar conmigo nada, ni una oportunidad). Lo lamentable de todo esto es que cuando el mayor vino hacia mí y quiso vivir conmigo mi propia familia, en especial mi hermana, le dijo que ni hablar – creándole un gran problema, pues confiaba en que mi casa sería su solución – y han persistido durante cinco años en la misma idea de que desconfíe de su padre porque “no está bien”. Al final se ha marchado a Madrid con su novia – cuando pudo estar aquí recuperarse de todo – ya le había buscado un psicólogo – y no gastarse el dinero que tiene ahorrado. Había conseguido arrinconar a la madre hasta el punto que (aun estando asesorada por Gloria Labarta como amiga personal desde nuestra separación, pues aún no se ha querido divorciar pensando que algo podrá rascar si yo fallezco) con verdades que publico en mi blog y hace un par de días le confesó la madre a mi hijo que no sabía querer, que nadie le había enseñado. Fue un impacto para él, pero mi hermana siguió presionándolo para que no viniera a mi casa (creo que se fue a una pensión un par de días, muy desconsolado y presionado hasta que decidió ir a Madrid). 
Que mi hermana actúe así conmigo y mi hijo no solo me parece lamentable sino indigno de una persona, presionar a un joven desde el primer día que con ilusión fue a verla y salió llorando y fue ingresado pocos días después. Muy lamentable. Porpio de corazones duros y piel fina. Por ello pedí a mi familia una reunión que me negaron hará ya un año, y en la misma quería exponer esta situación pero me dijeron que me permitirían hablar solo si solo me dejaba ingresar como enfermo mental. Los términos en que me quería expresar al final tuve que exponerlos en mi blog pues se negaron a tener esa reunión conmigo a pesar de mis suplicas.
En esta nueva ocasión y ante la cruel actuación de mi hermana publiqué un artículo que contiene lo siguiente respecto de ella:

Parece ser que leéis lo que podéis leer, cuando el tiempo os lo permite (y pese a las circunstancias) y aun así, cuando algo leéis buscáis a alguien del propio entorno que os lo interprete – como siempre habéis venido haciendo – para no tener que esforzaros en meditar desde vuestra propia experiencia personal. Creéis que los acontecimientos que otros viven desde la perspectiva familiar y que señalan divergencias esenciales en cómo contemplar situaciones personales y la propia vida (aparentemente complejas y realmente delicadas) no van con vosotros, porque de alguna manera habéis conseguido cierta estabilidad en el entorno social que os ha llevado a olvidar los momentos en que vosotros mismos tuvisteis que lidiar con situaciones semejantes (olvidasteis que, en vuestro caso, no estuvisteis solos – aunque ahora así lo concibáis y penséis que si salisteis bien librados en aquellas situaciones fuera porque os hicisteis vuestra propia suerte y os la merecéis, olvidando que tuvisteis apoyos que os permitieron entrar en una esfera de confort) y si hicierais el esfuerzo de intentar comprender lo que realmente sucede estaríais, de nuevo, entrando en ese mismo escenario del pasado y que habéis podido olvidar o que queda en vuestro recuerdo bloqueado, como si de una pesadilla a olvidar se tratara y ya superada. Olvidáis que si salisteis de aquello fue porque se os brindó apoyo, a cada uno de vosotros, y a la vez tuvisteis la suerte de tener alguien al lado de manera permanente que compartió con vosotros esa etapa que os permitiría tener una visión de la sociedad que os circunda y construir familia – que aunque no fuera una visión realista, al menos os proporcionaba una ruta a seguir – los obstáculos habrían sido superados en un primer momento y vuestro devenir sería determinado por esas líneas rojas que percibisteis en ese momento y que ya nunca traspasaríais, precisamente para no saliros de ese espacio de cierto confort alcanzado. 
Recibiste mi apoyo hermana cuando el padre te echó de casa por no hacerle la comida y te acogí en la mía por el tiempo que precisaras para recomponer y redireccionar tu vida; también me confiaste, al vivir en mi entorno y observar tus disgustos, el motivo de ellos y ello te sirvió para darte el impulso necesario para reorientar tus afectos hacia un lugar que resultó el que hizo posible que tuvieras una familia; pediste que te acompañara cuando te despidieron del trabajo y allí estuve llevándote en mi coche (le di prioridad a tu necesidad de apoyo o inseguridad) y el pago fue que cuando precisé un lugar para cobijarme en mi separación me negaste tu casa (ni siquiera me ofreciste el sofá para una noche); que cuando precisé vuestra presencia en los juzgados para recibir vuestro apoyo en mi separación, ninguno fuisteis; y que cuando te he pedido cualquier clase de apoyo tu respuesta ha sido construir un relato que me perjudicara para justificarte (los problemas mejor reconducirlos sobre él mismo; con el mensaje implícito, en un entorno de sálvese quien pueda, que caló, y yo me apunto el tanto). Pero cuando la última sentencia del TSJA me abría las puertas, allí estabas la primera para agasajarme y ponerte de mi lado (y eso que aún no había expresado mi persona la existencia de la misma y menos aún los términos que expresaba, pero ya concebías en el ambiente social que algo bueno había en mi entorno). El siguiente paso que se te ocurrió fue pedir que hiciera testamento (¿) (no tengo hijos y herederos? Esa es la cuestión final a la que se reduce toda tu preocupación? o es simple rivalidad con mi ex, que te ha hecho visualizar el camino a seguir para recibir respaldo social? – nunca podrás competir en ese terreno, porque siempre tuvo más apoyo y más recursos de alto nivel de los que tú nunca tendrás, y consiguientemente, más capacidad de malicia y de torcer la realidad y disimularla de la que tú puedas ejercer recién entrada en la Administración con más de 50 años).
Parece obvio que si he sobrevivido hasta este momento de mi vida (ante los muchos obstáculos vividos, de toda naturaleza y magnitud) es porque siempre ha existido en  mi entorno persona (o personas) con capacidad de ver honestamente lo que ocurre en mi entorno social y entrar en juego en el momento oportuno y decisivo (para mi bien). E incluso ello ha motivado en vosotros o celos o incredulidad (según sea el caso del momento en que se visualizaba; y siempre habéis dado un razonamiento bien adverso; eso sí, sin menoscabar la posibilidad de extraer beneficio – cuando uno de vosotros me pidió que usara mis “enchufes” para meterlo en el ayuntamiento); así concebís vosotros la vida y el entorno social en que vivís (no hay personas de bien, solo intereses de por medio). Realmente tenéis tanta desconfianza hacia mi persona? Habéis perdido, por un lado, la memoria y por otro – al llegar al espacio de confort – habéis creído que el mérito es solo vuestro, ignorando los diversos apoyos que de mi recibisteis cada uno de vosotros en el momento más delicado de vuestras vidas, cuando terminasteis por acudir a mí en busca de una salida que nadie  os ofrecía. Y el pago a mi apuesta por brindaros un espacio o un lugar desde donde reiniciaros ha sido desde la prepotencia y desde el negar los más elementales derechos de una persona: su credibilidad, su honestidad y las consecuencias que su buen proceder tuvo para con vosotros en ocasiones críticas para vuestras vidas - sin pararos en meditar en las circunstancias personales y/o por el contrario considerarlas o ajenas a vosotros o como consecuencias merecidas (lo que señalaría duro corazón) – y sin reparar que esa opción yo también la pudiera haber esgrimido en vez de apoyaros - (aunque fueran acciones ilegales sobre mi persona o apropiaciones de proyectos o méritos laborales que nunca se me han reconocido y que ahora se ven expropiados en un proyecto Pacto por la Ciencia) en lo que parece un verdadero lavado de manos generalizado (obstaculizáis el itinerario que él considera posible para quitarse inseguridades y establecer certezas por sí mismo (y lo mandáis en dirección contraria)– lo haga la madre, que está inmersa en una estrategia bien adversa hacia el marido, de la que no puede ya distanciarse porque todo en su vida ha sido apostado a esa carta, parece lógico; pero que se busque sintonía con ella en razones de “mandamos las mujeres” – y nos acogemos a cualquier rasgo o rol que lo avale - me parece inaceptable  y temerario; y de nefastas consecuencias siempre que ello se ha manifestado en entornos familiares rígidos). 



Segundo wasap en el grupo "parcela...." hacia mi hermano mayor:
Mariano qué te he hecho a ti?
Fue miedo lo que sintió mi padre, cuando la primera vez que fuimos al Clínico intentó dejar la maleta que llevaba yo con documentos sobre lo acaecido a mi persona en el Hall (mientras a la vez dos policías locales entraban delante de nosotros a toda prisa, ellos solos) Documentos que demostraban la separación real y efectiva del ejercicio de la Seguridad del Estado fuera del control real político en la práctica (como mi propio caso muestra cuando se interpone el Jefe de Policía Local a mi acceso a Guarda de Montes por encima de Concejal y del Alcalde y saltándose las leyes – y que solo es detectado por mi persona años más tarde, cuando consigo el documento por medio del Defensor del Pueblo – si se lo hubiera pedido al Justicia de Aragón seguro que aún lo estaría esperando).
. Así que intentar vosotros señalar, a estas alturas, que no ha pasado lo que ha pasado (a vuestra edad) resulta insostenible, pero entendible plenamente.
La visión de que apenas se puede oponer resistencia al miedo arraigado en España y en la sociedad la señaló quien estando en Valencia, en el Estado Mayor durante el golpe del 81 (por recomendación para ti de uno de nuestros tíos, ya que el segundo hijo (yo) desobedecía y persistía en estudiar y con esa persistencia se convirtiera en líder estudiantil en solitario para seguir estudiando; retornaste a casa, con permiso, viendo lo que se avecinaba (conociendo a mi padre, todo el barrio se debió enterar, menos mi persona – tal vez fuera, en algún rasgo, para bien, dado como resultaran las cosas en principio); 
A nadie que tenga un problema que resolver se le puede aconsejar que se apoye, para nada, en esta familia o en alguno de sus miembros; pues acabará yendo su problema entre bocas y bocas, lenguas y lenguas; se irá deformando según el parecer de cada cual y acabará convirtiéndose en un problema tan grave que, al final, se hará responsable, sí o sí, a quien fue a pedir ayuda y consejo.

Nadie responde por ahora; todo dentro de lo esperado.
(mando un print de pantalla a cada miembro del grupo salvo los que pienso que participan de la trama por el momento, por si alguien duda)

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